
La pizza sabe mejor caliente
Aunque la carrera republicana a la Casa Blanca comenzó hace meses, el proceso sigue repleto de dudas e incertidumbres que no se irán de un día para otro. Al fin y al cabo, las primarias aún no han empezado y las encuestas no confirman ninguna tendencia clara. En este contexto, no es muy extraño que las bases republicanas oscilen inseguras entre unos y otros candidatos.
En las últimas semanas, tras el desplome de Rick Perry en las encuestas y la falta de coherencia en el discurso de Mitt Romney, Herman Cain se ha confirmado como uno de los aspirantes más populares del proceso interno de los republicanos. Este afroamericano, nacido en Memphis hace 65 años, tiene una amplia experiencia en el sector privado, donde fue un alto ejecutivo de Burger King antes de dar el salto a la dirección de Godfather’s Pizza. Su biografía incluye, además, la publicación de diferentes libros sobre política y liderazgo, la grabación de discos de música gospel o la presentación de un programa radiofónico. Cain superó el cáncer en el año 2006, y desde entonces ha ido perfilando su carrera a la Casa Blanca, que formalizó este año con su entrada en las primarias republicanas.
Muchos activistas del Tea Party han apostado por Cain como nuevo abanderado de su causa. Sin embargo, el escrutinio mediático al que le ha sometido su repentino liderazgo en las encuestas ha puesto de relieve diferentes puntos débiles que conviene tener en cuenta. Al fin y al cabo, los liberales no deberíamos abrazar a un candidato que está muy lejos de nuestros postulados en asuntos como los que paso a comentar a continuación:
- - En primer lugar, es importante subrayar que Herman Cain está a favor de los rescates bancarios. En 2008 apoyó el polémico Plan TARP, un millonario manguerazo de dinero público destinado a rescatar a la banca… con cargo a los contribuyentes. Cain aplaudió los procesos de nacionalización afirmando que “no solamente no son malos, sino que pueden dar beneficios al gobierno federal”. Según el candidato republicano, los rescates son una situación inmejorable “en la que los contribuyentes solamente pueden ganar o ganar”. Posteriormente, en mayo de 2011, Cain volvió a hablar del tema y declaró no tener “ningún remordimiento” por haber aprobado tales acciones, confirmando así su apoyo a una de las iniciativas más intervencionistas de la historia reciente de EEUU…
- - En segundo lugar, conviene tener en cuenta que Herman Cain apoya de forma entusiasta la política monetaria de la Reserva Federal diseñada por Alan Greenspan, desestimando la necesidad de auditar dicha institución y definiendo a quienes insisten en dicho escrutinio como “estúpidos”. Cain ha alabado reiteradamente su trabajo al frente del banco central estadounidense, calificando su gestión como “admirable”. Eso sí, no deberíamos sorprendernos de su apoyo a la política monetaria de la inflación y el dinero barato: hace años, el propio Cain fue presidente de la Reserva Federal de Kansas City…
- - En tercer lugar, sus opiniones en materia de política exterior son, como mínimo, cuestionables. Un ejemplo: Cain no solamente aprobó la guerra de Iraq, sino que se niega a aceptar cualquier calendario de salida para las tropas estadounidenses.
- - En cuarto lugar, a la hora de pronunciarse sobre determinados asuntos sociales, Herman Cain ha demostrado ser especialmente reaccionario. Algunos ejemplos: sus desafortunadas declaraciones sobre la comunidad musulmana, sus bromas sobre la posibilidad de aplicar descargas eléctricas en la valla que separa México y EEUU, su apoyo firme a la “guerra contra las drogas”, su inconsistencia a la hora de posicionarse claramente y sin titubeos contra el aborto, su postura contra el servicio de soldados homosexuales en el Ejército…
La lista sigue y sigue. Sin embargo, es importante y justo subrayar que, pese a todo lo anterior, Cain no es siempre hostil a las tesis liberales. Aquí van algunos ejemplos:
- - El antiguo magnate de las pizzas ha afirmado en varias ocasiones que abandonar el patrón oro fue “un gran error”. En su opinión, dicha decisión ha creado un auténtico “desorden” que ha generado un grave problema de endeudamiento.
- - El aspirante a ocupar el Despacho Oval también se opone a aumentar el límite de deuda autorizado en el presupuesto federal. Cain ha afirmado que la postura del presidente Barack Obama en esta cuestión ha sido una irresponsable “maniobra intimidatoria”.
- - Cain ha criticado el sistema de Seguridad Social estadounidense, basado en el mismo sistema de reparto que poco a poco implosiona en España y Europa. El antiguo magnate de las pizzas prefiere introducir en EEUU el célebre modelo chileno popularizado por José Piñera y basado en una capitalización individual del ahorro. Con esta propuesta, Hermain Cain abraza una de las causas liberales más exitosas de las últimas décadas.
- - El candidato a la Presidencia también se opone a las leyes de “discriminación positiva”, rechazando cualquier tipo de legislación que cree diferencias entre colectivos. En opinión de Cain, lo que importa es la defensa de la igualdad ante la ley.
- - Preguntado por el movimiento “Ocupa Wall Street” (un colectivo equivalente al 15-M español), Cain envió un duro mensaje a los “indignados”, acusándolos de “envidiosos” y de intentar distraer la atención sobre los fallos de la Administración Obama.
Sin embargo, si hay una propuesta que ha causado revuelo en las elecciones primarias ha sido su “Plan 999″, con el que Cain propone eliminar el actual código fiscal y reemplazarlo por un nuevo sistema de impuestos. Así las cosas, los estadounidenses pasarían a pagar un 9% como impuesto de sociedades, un 9% como impuesto sobre la renta y un 9% como IVA nacional.
El plan apunta en la dirección correcta. Al fin y al cabo, simplificar y reducir los impuestos es la única manera de reducir el tamaño del Estado y recuperar el rumbo económico en las sociedades desarrolladas. Sin embargo, por mucho que algunos liberales lo hayan obviado, no parece claro que el “Plan 999” pretenda reducir el gasto federal, algo especialmente importante ahora que ha alcanzado niveles históricos en EEUU.
Según el propio Cain, su plan “recaudaría tanto dinero como el sistema actual, aunque de forma más eficiente”. No estamos, pues, ante una cuestión menor: el propio creador de la iniciativa ha confirmado que el “Plan 999” no pretende reducir el gasto, sino recaudarlo de otra manera. Por lo tanto, puede que nos encontremos ante una gran propuesta desde el punto de vista “lafferiano”, pero no queda claro que esta sea una iniciativa liberal.
Al margen de esta cuestión, hay otros aspectos del “Plan 999” que también conviene analizar con detenimiento. Un punto especialmente inquietante es la introducción de un impuesto nacional al valor añadido, ya que dicho tributo se sumaría al IVA recaudado a nivel estatal por diferentes territorios de la unión. Introducir un IVA federal aplicaría un castigo adicional al bolsillo de los contribuyentes.
Otro problema es el asunto de la “progresividad”. El propio Cain anunció que el plan sería de aplicación general para todos los estadounidenses, pero las críticas le han llevado a afirmar que introduciría una nueva variante, que sería el 9-0-9, excluyendo así la aplicación del impuesto sobre la renta para las personas de menores ingresos. Sin embargo, la cuestión sigue planteando numerosos interrogantes debido a la falta de claridad del candidato nacido en Memphis. Tampoco podemos obviar el estudio del Tax Policy Center que afirma que el “Plan 999” eleva los impuestos para el 84% de los estadounidenses. Cuando Rick Santorum (otro candidato republicano a la presidencia) preguntó a Cain sobre las conclusiones del informe, el empresario se hizo el loco una vez más, y se limitó a instar a todo aquel que tuviese dudas a que “haga las cuentas”…
No podemos pasar por alto un nuevo punto negro del plan de Herman Cain: la eliminación de las deducciones fiscales aplicadas en el impuesto sobre la renta. Por esta cuestión Peter Schiff ha declarado que el “Plan 999” se debería llamar “Plan 9999”.
Finalmente, tal y como avanzó Toni Mascaró en Libre Mercado, el plan no eliminará unos 90,000 millones de dólares que se recaudan en ciertos impuestos especiales. Se mantendrían, pues, las tasas a la gasolina, el alcohol, el tabaco, las armas de fuego, los billetes de avión y el servicio telefónico…
Así las cosas, cerrado este análisis sobre la propuesta estrella de Herman Cain, es evidente que el “Plan 999” parece mucho mejor idea de la que realmente es una vez se analizan todos sus elementos. Por decirlo de otra forma, la pizza de Herman Cain sabe mucho mejor caliente que fría… Eso sí: los estadounidenses que apuesten por la libertad individual y el gobierno limitado no tienen por qué preocuparse. Al fin y al cabo, el congresista Ron Paul es uno de los rivales de Herman Cain en la carrera republicana a la Casa Blanca, y en su caso, su firme adhesión a la causa liberal es difícilmente discutible.
Una vez más, tenemos "lo que se ve" y "lo que no se ve". En el Plan 999 había muchas cosas que podían sonar bien a primera vista, pero en el fondo, todo cambia para que nada cambie. Podrá ser "eficiente", como comentas, pero desde luego que no es liberal. Buen análisis, como siempre.
Libre Mercado acaba de publicar mi nuevo artículo: “La pizza sabe mejor caliente”. Se trata de un análisis, desde el punto de vista liberal, del aspirante republicano a la Casa Blanca Herman Cain. Para leer el texto completo, hagan click aquí.
El gran problema de Cain, es que con el la FED va a seguir haciendo de las suyas, ademas no lo veo disminuyendo el peso del estado ni mucho menos...
O reducen la deuda publica que ya pasa del 100% del producto interior bruto (PIB) del país, hecho que no se producia desde 1947 o van a tener que vender la nación a los Chinos. muy buen analisis por la radiografia completa que aportas. mi enhorabuena
Un artículo de excelencia. Felicitaciones!!!
Felicitación a L. D. por incorporar jóvenes talentos. Ánimo a Diego, da esperanza ver que la natural rebeldía juvenil se encauce en luchar contra la dictadura de lo políticamente correcto,la resignación del pesebre del erario público y la pereza mental de quienes apuestan por que piensen o inventen otros. Un joven aseado y trabajador puede ser más progresista que los "perroflautas" que hemos soportado tantos meses para vergüenza nacional, anclados en clichés trasnochados y en la vacuidad intelectual más absoluta.
mi enhorabuena sigue asi rapaz un abrazo
He disfrutado con sus artículos pero en este último me ha decepcionado, el abortismo no es de liberales, eso es confundir el cosmos con la cosmética. Si quiere ser Vd. libre, haga el bien, sea generoso, ame, sacrifíquese por los demás y responsabilícese de sus actos. Nada de esto tiene que ver con el aborto.
Estimado lector, Quiero aclarar que en ningún momento me he posicionado a favor del aborto, sino que me he limitado a señalar que Herman Cain no ha sabido pronunciarse de forma clara en esta cuestión. Si lee con detenimiento mi referencia al respecto ("inconsistencia a la hora de posicionarse claramente y sin titubeos contra el aborto") apreciará que mi crítica es que el candidato republicano no haya defendido de manera clara una posición pro-vida. Muchas gracias por su interés por mi trabajo, un cordial saludo.