En los Presupuestos Generales de 2021 se incluyó una modificación fiscal notable que afectaba a los planes de pensiones individuales. El cambio consistía en bajar de los 8.000 euros a los 2.000 el límite de aportaciones que se podían desgravar los partícipes en el IRPF. Tras un año en vigor, se ha registrado una fuerte caída del 40% en el volumen de aportaciones en comparación con 2020. Es decir, se ha confirmado que la medida aplicada por el Gobierno ha afectado duramente al sector de la gestión de activos enfocada a los planes de pensiones.
A pesar de que el patrimonio gestionado por estos vehículos de inversión ha crecido un 8% con respecto al año anterior, esto se debe al rendimiento positivo de las carteras. Desde Inverco, aseguran que el crecimiento de los Planes Individuales correspondió en exclusiva a revalorizaciones de carteras por efecto de mercado, puesto que se registraron prestaciones netas (-117 millones de euros).
Las aportaciones brutas en 2021 se redujeron hasta los 3.833 millones de euros para el total de planes. Este descenso se concentró en los Planes del Sistema Individual, cuyas aportaciones brutas se redujeron un 40% en 2021. Las prestaciones brutas se redujeron hasta los 4.103 millones, por lo que las prestaciones netas en 2021 fueron de 270 millones de euros.
Sin embargo, lo peor podría estar por llegar, debido a la nueva reducción en el año 2022. Para 2022, se ha establecido una nueva reducción en el límite máximo de aportación pasando de 2.000 euros anuales a 1.500 euros. Según estimaciones de Inverco, el nuevo límite puede suponer previsiblemente una reducción adicional superior a los 320 millones en las aportaciones al Sistema Individual (12% menos de las realizadas en 2021).
Según afirman desde la asociación, estas reducciones van a afectar de forma sensible a una gran parte de los ahorradores en Planes de Pensiones: con información disponible de la Agencia Tributaria, el 73,5% de aportantes (salarios< 45.000), realizan una aportación media inferior a 2.000€, y el 54,9% (salarios).
Por su parte, y según las cifras de DGSFP, las dos modificaciones en los límites de aportación, van a afectar al ahorro de más de más de 1.300.000 partícipes que según las cifras de DGSFP de finales de 2020 hicieron aportaciones superiores a 1.500 euros. Es decir, el 40% de los partícipes que hacen aportaciones en el año se verá afectado por dicha reducción.