Almirall registró pérdidas netas de 40,9 millones de euros en 2021, frente a las ganancias de 74,3 millones de euros que obtuvo en 2020, según ha informado este lunes la farmacéutica a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La compañía ha atribuido este resultado al deterioro en 103 millones de euros del valor contable del activo intangible de Seysara (69 millones), de la cartera 'legacy' de Estados Unidos (22 millones de euros) y al pago por la opción de compra de Bioniz, finalmente no ejecutada (12 millones de euros).
No obstante, Almirall ha destacado que su resultado neto normalizado alcanzó los 81,4 millones de euros en 2021, un 14,4% inferior al de 2020.
El beneficio bruto de explotación de la farmacéutica (Ebitda) ascendió a 235,6 millones de euros el año pasado, un 1,1% menos, mientras que los ingresos totales de la compañía se elevaron un 2,7% respecto a 2020, hasta los 836,5 millones de euros.
Dentro de los ingresos totales, las ventas netas alcanzaron los 827,7 millones de euros, un 2,5% más, debido, según Almirall, a la contribución positiva de sus motores de crecimiento y a "los buenos resultados" de su negocio dermatológico en la Unión Europea.
En este sentido, el grupo ha resaltado el "excelente impulso" de las ventas procurado por Ilumetri, para el tratamiento de la psoriaris, que contribuyó al crecimiento global con unas ventas netas de 82 millones de euros en Europa.
Al mismo tiempo, ha destacado que Seysara, antibiótico oral para el tratamiento del acné, experimentó una "mejora constante" en el volumen de prescripciones y cuota de mercado en Estados Unidos en el área de los antibióticos orales, mientras que Klisyri, un nuevo inhibidor de los microtúbulos para el tratamiento tópico de la queratosis actínica de la cara o el cuero cabelludo, mostró "una muy buena acogida inicial en el mercado alemán y británico".
Cumple sus objetivos en el rango alto
Las ventas netas 'core' de Almirall, excluyendo la contribución de AstraZeneca, totalizaron 809,8 millones de euros en 2021, con un incremento interanual del 7,2%, mientras que el 'core' Ebitda fue de 211,3 millones de euros, un 16,7% superior al de 2020. Ambas cifras se encuentran en el rango alto de los objetivos de la farmacéutica para 2021.
El margen bruto de la compañía alcanzó los 571,3 millones de euros en 2021, con un aumento del 2% sobre 2020, en tanto que el flujo de caja operativo sumó 233,8 millones de euros. Ello dio lugar a un "balance saneado", de forma que Almirall finalizó 2021 con una relación entre la deuda neta y el Ebitda de 1,0 veces.
Los gastos en Investigación y Desarrollo de la farmacéutica ascendieron a 73,6 millones de euros el año pasado, con un descenso del 6,7% respecto a 2020, aunque alcanzaron el objetivo previsto de representar el 9,1% de las ventas netas 'core'.
Dividendo y metas para 2022
De cara a 2022, Almirall prevé un crecimiento de las ventas netas 'core' de un dígito medio y un Ebitda total de entre 190 y 210 millones de euros.
"2021 ha sido un buen año para Almirall tanto desde el punto de vista financiero como en lo que respecta al progreso del 'pipeline'. El negocio ha tenido un sólido rendimiento impulsado por nuestros motores de crecimiento y nos complace haber cumplido con nuestro 'guidance' mejorado en el rango alto del Core Ebitda", ha destacado el CEO de Almirall Gianfranco Nazzi.
"Comenzamos el año 2022 con la certeza de que nos movemos en la dirección estratégica correcta. Estamos viendo un excelente rendimiento del negocio y confiamos en que los productos clave de Almirall continuarán su trayectoria mientras seguimos invirtiendo para apoyar los lanzamientos más recientes", ha añadido Nazzi.
Almirall ha informado además de que la junta general de accionistas propondrá un dividendo de 0,19 euros por acción que someterá a aprobación el próximo 6 de mayo, fecha en la que se producirá también el relevo en la Presidencia de la compañía.