La reventa siempre ha existido, pero en los últimos tiempos este tipo de práctica se ha ido extendiendo y perfeccionando en distintos sectores, como el de las zapatillas, donde muchos de sus protagonistas comercializan deportivas por el triple del valor original o incluso más.
De hecho, como si se tratase de acciones o de criptomonedas, muchos de los revendedores de zapatillas han convertido a estos objetos en un activo más para invertir. Así, esta actividad se ha convertido en su sueldo mensual.
Todo comienza cuando los revendedores se hacen con las deportivas a precio del reatil (original), que es el precio que sacan las tiendas originales de distintas marcas, como Nike, Adidas, footdistrict... La mayoría son nuevas y se agotan en cuestión de segundos porque son colecciones limitadas. Los revendedores son los más rápidos en hacerse con ellas.
Stockx es la plataforma más conocida para todos esos revendedores que quieren dar salida a sus zapatillas. Libre Mercado ha tenido la oportunidad de hablar con una persona que se dedica a la reventa de zapatillas, aunque ha preferido mantenerse en el anonimato. Este revendedor nos cuenta cómo se fija el precio de mercado y a través de qué plataforma se vende. "El precio de cada par suele estar fijado por la aplicación Stockx, que básicamente es el intermediario de zapatillas más grande del mundo".
"Mucha gente cree que está comprando en una tienda, pero en realidad está comprando a un revendedor particular. Por ejemplo, una persona que quiera comprar unas Jordan 1 Mid color Chicago (rojo negro), busca en internet para comprarlas y ve que no están disponibles en ninguna tienda a su precio original, que es de 120 euros. Entonces, mira precios en plataformas de reventa como Stockx, Klekt, Restocks o sitios de segunda mano como Vinted y Wallapop. Finalmente, si decide comprar el par a Stockx, ya que suele ser el sitio más conocido, el par le saldrá por unos 250 euros más tasas y envíos, que se queda Stockx. En total, le sale a 290 euros y le llegarán en cerca de 2 semanas", explica.
Ahora nos explica cómo el revendedor recibe el dinero. "Al vendedor, que previamente tenía una oferta hecha de su par, le salta una notificación al correo de que ha vendido su par a 250 euros (menos tasas, envíos...) y gana unos 210 euros porque también se le resta el envío y las tasas". Asimismo, la página Stockx se lleva "entre 70-80 euros" por facilitar la transacción y el vendedor gana la diferencia entre el precio retail y el precio al que ha vendido su par menos el envío y las tasas, por lo que recibe limpios 90-100 euros por el producto".
Como hemos podido comprobar y como nos ha contado el revendedor anónimo, Stockx se lleva un gran porcentaje de la transacción. Eso ha hecho que inmediatamente salgan otras plataformas para revender zapatillas donde el intermediario no se lleve tanto dinero, como Vinted, Wallapop, etc. "En estas aplicaciones de segunda mano vendes tu par sin comisión para el vendedor. El comprador paga el envío y la protección de envío. Es decir, hasta que no le llegue su par como está indicado en el anuncio, no se realiza el pago y el dinero queda retenido por la aplicación" explica.
SNS, END Clothing, Shinzo París, Footlocker, Footdistrict o Solebox son las que más pares de zapatillas tienen y se agotan en cuestión de segundos. Algunas tiendas suelen hacer raffles (sorteos) para los clientes por la gran demanda que hay.
Con el boom de la pandemia, el negocio de la reventa se ha incrementado. De hecho, incluso se han llegado a crear grupos especializados para explicar en qué consiste la reventa de zapatillas y cómo adentrarse en este mundo. "Hay algunos grupos de discord, como los cookgroup, que son grupos de personas, que llevan más tiempo en el mundo de la reventa y ayudan a otros revendedores a través de enlaces, información extra, monitores que te avisan cuando hacen restock (vuelve a haber producto) de una zapatilla... ya sea para poder revenderlo o quedártelo para darle uso. Para estar en este tipo de grupos hay que pagar. Algunos son más caros y suelen costar unos 30-35 euros al mes. Otros son más baratos, y suelen costar 5-15 euros al mes, aunque casi todos los cookgroup que son más o menos decentes están siempre con las plazas agotadas" cuenta el revendedor anónimo.
Este lucrativo negocio podría ser muy suculento para Hacienda, aunque los revendedores son (todavía) confiados. "La gente no tributa sus beneficios porque están seguros de que Hacienda no suele entrar a mirar la actividad a gente con ingresos menores. Otra gente lo que hace, si tienen más dinero, es hacerse una cuenta de Revolut (banco que no opera en España) desde donde tienen todo su dinero", cuenta. "No conozco casos de revendedores a los que les hayan puesto una multa o les hayan dicho algo por no tributar y mira que conozco a cientos e, incluso, gente que mueve mucha cantidad de dinero (10.000 euros al mes). Yo en un mes he llegado a ganar unos 600-700 euros", asegura el revendedor.