En junio de 2021, la revista Forbes situó a Novak Djokovic en el puesto 46 de la lista que reúne a los 100 deportistas mejor pagados del mundo. Poco después, la ATP certificó que su carrera en las pistas le ha reportado más de 150 millones de dólares en concepto de premios deportivos. Por tanto, los datos muestran que el tenista serbio ha sabido traducir su excelente desempeño en las pistas a un bagaje muy notable en el campo económico.
Sin embargo, es importante recalcar que el grueso de los ingresos que obtiene Djokovic no provienen de los premios obtenidos en el circuito ATP, sino de los pagos complementarios que ha conseguido merced a sus triunfos en los torneos más importantes del circuito. Por ejemplo, entre 2020 y 2021, Djokovic obtuvo algo menos del 15% de sus ingresos por esta vía.
En cambio, y al igual de lo que sucede con muchos otros jugadores, los ingresos atípicos se han convertido en una auténtica mina de oro para Djokovic. Así, en 2020 y 2021, el patrocinio de marcas como Asics, Head, Hublot o Lacoste le reportó la friolera de 30 millones de dólares, muy por encima de los 4,5 millones que recibió de la ATP.
La estimación de ingresos anuales publicada por Forbes muestra que Federer es el tenista mejor pagado del mundo, con una facturación que supera los 90 millones por temporada. El podio lo completan Naomi Osaka, en el entorno de los 60 millones, y Serena Williams, por encima de los 40 millones. Justo a continuación aparecen el propio Djokovic y el español Rafa Nadal, que cierran el "top cinco".
La caída de los ingresos por taquilla motivada por las reducciones de aforo que se han aprobado a raíz de la pandemia del coronavirus ha hecho que los premios obtenidos por el desempeño en el circuito de la ATP pierdan aún más peso en la cuenta de resultados de los grandes tenistas (en promedio, los premios concedidos han caído hasta un 35%, aunque ya están volviendo a aumentar). En cambio, los acuerdos de patrocinio se han mantenido intactos en la gran mayoría de casos (de hecho, estos ingresos han subido un 4% durante el último año).
De igual manera, es llamativo que el "top cinco" del mundo del tenis esté poblado de jugadores que ya han dejado atrás sus mejores días en las pistas y empiezan a encarar la fase final de su carrera. Esto confirmaría que, en el mundo de la raqueta, la gloria deportiva llega antes de la gloria económica, que a su vez permite rentabilizar éxitos pasados cuando el desempeño en la pista empieza a resentirse.