El desbloqueo de la Operación Chamartín, rebautizada como Madrid Nuevo Norte, ha abierto un tiempo nuevo para el norte de la ciudad, que se prepara para una gran transformación impulsada por una gran alianza público-privada. El Director de la Oficina de Madrid Nuevo Norte, José Luis Moreno, se ha entrevistado con Libre Mercado para explicar los últimos desarrollos del proyecto.
Poco a poco, y tras décadas de retraso, esta gran iniciativa empieza a ser una realidad que cada vez genera más apetito entre los inversores internacionales.
Así es. El otro día estuvimos con un inversor del área de Medio Oriente y nos decía que Madrid, en los próximos diez años, va a crecer mucho más de lo que creemos y que puede empezar a competir con París o Londres. Hay una valoración muy favorable de las infraestructuras, del clima, de la cultura, de la gastronomía, de su modelo económico liberal… y, por supuesto, de nuestro capital humano, es decir, de nuestra gente.
¿Es cierto que en Wall Street ya se habla de Madrid Nuevo Norte?
Efectivamente. La presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso estuvo recientemente en Nueva York, donde hizo un road show muy exitoso en el que se reunió con algunos de los fondos más importantes del mundo. La mayoría de estas entidades han mostrado ya su interés por invertir de una u otra manera en las distintas iniciativas que forman parte del proyecto. Y lo hacen porque creen en Madrid como región abierta y liberal y porque creen en el proyecto por su naturaleza innovadora y sostenible.
Más allá de vivienda y espacios verdes, ¿qué desarrollos se van a realizar en Madrid Nuevo Norte?
Estamos trabajando para que el Norte de Madrid cuente con un gran museo de nivel mundial, una universidad de referencia y un proyecto de alcance relacionado con la sanidad o con el deporte. Además, habrá un centro de empresas de innovación, probablemente vinculado a la innovación financiera.
Se trata, además, de una gran transformación urbanística.
Es un proyecto muy complejo desde el punto de vista de la ingeniería, de la construcción, del ámbito inmobiliario… En clave económica, se van a crear 350.000 puestos de trabajo, de los cuales 200.000 se corresponden con la fase constructiva, que abarcará varios lustros, y otros 150.000, derivados de la nueva economía del norte de la ciudad.
Hay un dato que es muy llamativo. Se van a demoler 850.000 toneladas de material, lo que equivale a derruir dos veces el Empire State Building de Nueva York. Esos materiales se van a transformar ahí mismo en nuevos materiales de construcción, de modo que hablamos de un proyecto de referencia para la economía circular.
El proyecto apuesta por el medio ambiente, pero en clave liberal. Sin intervencionismo, a base de innovación.
Cuando el hombre vivía en la cueva, la economía era baja en carbono… pero claro, la calidad de vida era impresentable. Hay quienes hoy en día siguen pensando que hay que enfrentar el medio ambiente con la economía, cuando en realidad una economía más abierta y dinámica es precisamente lo que más asegura que el crecimiento puede ser más sostenible. En MNN hacemos eso: apostamos por la innovación energética, por los métodos de construcción más modernos, por sistemas de transporte inteligentes… De modo que le vamos a hacer la vida mucho más fácil a la gente, pero sin obligarles a que renuncien al desarrollo económico y a la comodidad, lo cual es vital. La innovación y el emprendimiento te permiten hacer más con menos.
El sistema de movilidad de Madrid va a salir muy reforzado. Por ejemplo, se reforma el Nudo Norte, que ahora mismo provoca unos enormes atascos por su falta de capacidad. De igual modo, se soterran las vías de tren de la Estación de Chamartín, lo que no facilita el tránsito en esta zona de Madrid y al mismo tiempo permite crear nuevos espacios verdes. Y, además, se crean nuevas estaciones de transporte público.
El impacto económico va a ser notable.
Está prevista una inversión total de 15.300 millones de euros. El grueso de esa inyección viene del bolsillo del sector privado, que aportará cuatro de cada cinco euros. De hecho, hasta las tres nuevas estaciones de Metro se van a desarrollar con aportaciones de las empresas involucradas. Pero lo importante es que, después de la fase constructiva, que sin duda va a ser monumental y va a transformar nuestra ciudad y nuestra región, vamos a disfrutar de un mayor crecimiento potencial, gracias a los nuevos espacios y dotaciones de esta nueva zona norte.