El índice de precios de producción industrial de Alemania registró el pasado mes de octubre una subida interanual del 18,4%, después del alza del 14,2% de septiembre, lo que representa el mayor incremento de los costes de las fábricas germanas desde noviembre de 1951, según ha informado la Oficina Federal de Estadística (Destatis), que atribuyó en gran medida la escalada a los precios de la energía.
En comparación con el mes precedente, los precios de producción industrial de la mayor economía europea subieron un 3,8%, acelerándose respecto del alza mensual del 2,3% registrada en septiembre.
Los precios de la energía registraron en octubre una subida interanual del 48,2%, reflejando el fuerte incremento de precios del gas natural (81,4%) y de la electricidad (49,6%). De este modo, el índice de precios de producción industrial sin tener en cuenta el impacto de la energía subió en octubre un 9,2% respecto del mismo mes de 2020.
En comparación con octubre del año pasado, los precios de los bienes intermedios aumentaron un 18,1%, como consecuencia del aumento de los precios de los metales (37,8%), incluyendo un alza del 67,4% del aluminio.
Asimismo, los precios de las materias primas secundarias no metálicas aumentaron un 95,7% y los de los plásticos en formas primarias un 23,2%, mientras que los alimentos preparados para animales se encarecieron un 22,6% y los precios de la harina de cereales un 16,1%.
De su lado, los precios de los bienes de consumo duraderos aumentaron un 3,4% en comparación con octubre de 2020, principalmente debido a la evolución de los precios de los muebles (+4,3%). Los precios de los bienes de capital, como máquinas y vehículos, aumentaron un 3,2%, impulsados principalmente por la evolución de los precios de los productos metálicos estructurales (+14,4%) y de los tanques, depósitos y contenedores metálicos (+ 10,6%).
A su vez, los precios de los bienes de consumo no duraderos aumentaron un 3% en comparación con octubre de 2020. En concreto, los alimentos se encarecieron un 3,7%, incluyendo un alza del 48,3% de los aceites vegetales crudos, mientras que los precios de la mantequilla subieron un 18,8% y los de la carne de vacuno un 14,2%. Los precios del pan y de la pastelería fresca aumentaron un 3,7%. Por el contrario, los precios de la carne de cerdo bajaron un 5,1%.