Hoy en día, según el Banco de España, un 35% de españoles reconoce no contar con las nociones básicas necesarias sobre cultura financiera, un conocimiento indispensable para gestionar su patrimonio y buscar una alta rentabilidad para su dinero.
Hay muchos sectores que necesitan de apoyo y educación centrada en las finanzas: niños, jóvenes, personas mayores y colectivos que por diversas circunstancias se encuentran en riesgo de exclusión. Es lo que se reitera en el Día de la Educación Financiera, que se ha celebrado esta semana. Un asunto que cada vez está involucrando a más empresas, como Banco Santander, al tratarse de una herramienta esencial para desenvolverse con éxito en nuestra sociedad.
Las personas privadas de libertad son unos de esos colectivos más vulnerables. Banco Santander, en un acuerdo con Instituciones Penitenciarias y la Fundación UCEIF, ha impulsado el programa Finanzas para Mortales - Justicia Educativa mediante el que diversos voluntarios de la entidad imparten talleres de educación financiera a personas internas en estos centros.
Las dos primeras jornadas de estos talleres se centran en el conocimiento de las diversas salidas laborales a las que podrán optar los participantes, adentrándose en los conceptos básicos de diversos productos financieros con el fin de que aprendan a organizarse y obtengan una base sobre cultura financiera.
El objetivo de este programa es que cuenten con las herramientas necesarias para construirse un futuro al salir del centro. Por ahora, se han impartido clases en las cárceles de Teixeiro, Picassent, Burgos y El Dueso.