Desde confeccionar batas hasta conformar uno de los mayores grupos empresariales del mundo —Inditex—, la historia de Zara y especialmente de Amancio Ortega es ya muy conocida. En la pequeña localidad gallega de Arteixo, el tercer hombre más rico del mundo, según Bloomberg, ha levantado el imperio textil más grande conocido, cuya responsabilidad, tal vez, permanezca en manos de la familia Ortega, concretamente en las manos de Marta, hija de Amancio, que así lo ha declarado.
Tras haber concedido recientemente su primera entrevista a The Wall Street Journal, que titula como Por qué Marta Ortega es el secreto del éxito de Zara, la heredera del fundador de Inditex abre la puerta a un posible relevo para su padre. "Siempre estaré allí donde la empresa más necesite", afirma. Y es que sus palabras, tras 14 años en la compañía y dada la avanzada edad de su padre, parecen toda una declaración de intenciones. Ya el conceder una entrevista, totalmente contraria a la política de su padre, que nunca ha concedido una, dice mucho.
Pese a mostrar su preferencia por el trabajo de tienda, además de haber negado su intención de asumir un cargo de responsabilidad en un futuro inmediato, Marta Ortega no descarta nada, y así lo ha reconocido. "Nunca sabes cómo va a ser el futuro. Yo estoy abierta", dice.
En la misma línea, el artículo también recoge las palabras del presidente ejecutivo de Inditex, Pablo Isla, sobre Ortega. Más allá de resaltar su humildad y sus fuertes opiniones, confiesa su creencia de que la importancia de Marta irá incrementando progresivamente dentro del grupo en los próximos años.