Lejos de descartarlo, el Gobierno avala la ocurrencia del Gobierno valenciano, liderado por Ximo Puig, de un impuesto especial para Madrid. Así lo ha defendido el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, tras reunirse con el propio Puig en Valencia: "Es una idea que hay que seguir explorando y tiene mucho recorrido".
El ministro y expresidente de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha destacado que los países avanzan "claramente" en evitar la competencia fiscal y en tener bases tributarias sólidas. "No tiene mucho sentido que a nivel autonómico en España estemos recorriendo el camino contrario", ha constatado, por lo que ha llamado a abordarlo claramente y de forma decidida.
Ximo Puig ha asegurado en la rueda de prensa que coincide "absolutamente" con Escrivá y ha reiterado que no cree que tenga ningún sentido que haya dumping fiscal en España cuando se intenta establecer un "suelo fiscal" en los países desarrollados. Por tanto, a su juicio es positivo todo lo que contribuya a garantizar la igualdad desde los españoles "desde la singularidad territorial".
"Los regalos fiscales siempre acaba pagándolos alguien", ha señalado el también líder del PSPV, quien apuesta por armonizar (es decir, subir) los impuestos en el conjunto de la Unión Europea para implantar una base común y que "realmente exista igualdad de oportunidades".
Las palabras de Escrivá llegan después de que Ayuso escuchara comentarios en esta línea en la Conferencia de Presidentes, según ella misma denunció ante los medios. La presidenta madrileña negó la supuesta ventaja de la capitalidad y animó al resto de regiones a abrazar su política fiscal en lugar de denostarla.
Este mismo jueves, el consejero de Economía valenciano defendía la polémica tasa en una entrevista en El Mundo alegando que "todos hemos hecho crecer a Madrid y ahora debe repartir".