El bitcoin ha vuelto a desinflarse este lunes después de repuntar casi el 21% la semana pasada, animadas por rumores que apuntaban a que Amazon podría ofrecer soporte para pagos en bitcoin y que Tesla podría volver a aceptar la criptomoneda como medio de pago.
A cierre de mercado del pasado viernes, el bitcoin tocó los 40.767 dólares (34.347 euros) y se vendía a 39.005 dólares (32.890 euros), esto supone una subida del 20,65% en una semana. No obstante, este lunes a las 13.00 horas el activo se vendía a 39.739 dólares (33.419 euros), un 4,28% menos que el día anterior.
El ethereum, por su parte, cerró el viernes en 2.340 dólares (1.973 euros), con lo que en una semana la criptomoneda registró una subida del 14,31%, y este lunes subía un 0,49% hasta los 2.596 dólares (2.183 euros).
El analista de IG, Sergio Ávila, ha especificado que las caídas del bitcoin se deben a que el activo se ha encontrado con la media móvil de 200 días, de 42.600 dólares (35.826 euros) y la media móvil de 30 semanas, unos niveles "muy vigilados por todos los inversores" y zonas difíciles de superar en el primer intento, ya que algunos inversores "materializan beneficios tras fuertes subidas".
La cotización de las criptomonedas volvió a la senda alcista el martes pasado, al conocerse que Tesla se está replanteando volver a aceptar el bitcoin como medio de pago si la criptomoneda era minada con energías limpias.
A esto se suman los rumores de que Amazon estaría buscando trabajadores para implantar el pago con criptomonedas en su plataforma y podría sacar su propio token, si bien la multinacional los ha desmentido, aunque ha señalado que seguiría explotando el sector.
"Esto nos muestra que el desarrollo de la capacidad de las criptomonedas para ser utilizadas como opción de transacción tendría un impacto crucial sobre su futuro movimiento en el mercado", ha señalado el responsable de Bitpanda en España, Alejandro Zala.
Zala ha incidido en que a estas alturas "está bastante claro que las criptomonedas han demostrado ser activos sólidos y valiosos en el ámbito de la inversión" y que "podrían representar el futuro del dinero".
"Es normal que cada vez más empresas recurran a las criptomonedas como opción de pago alternativa, como también lo es que rumores como el del nuevo anuncio de empleo de Amazon haya captado la atención de todo el mundo", ha incidido.
A pesar de que Amazon desmiente la futura creación de su propia criptomoneda o el pago con cripto, Zala ha puesto de relieve que la compañía seguiría explorando el sector, algo que en Bitpanda consideran "el proceso natural". No obstante, otros expertos como los cofundadores de Atani, Paul Barroso y Haydée Barroso, han restado importancia a las fluctuaciones en el precio a corto plazo.
"Hay que entender que las dinámicas que influyen en el precio a corto plazo pueden o no tener relevancia en la valoración fundamental y el precio de largo plazo. La cotización es extraordinariamente relevante para hacer 'trading', pero no necesariamente para invertir a largo plazo", ha incidido Paul Barroso en un comentario remitido.
El cofundador de Atani ha añadido que la corrección que se observó hace un par de meses en las criptomonedas fue "necesaria", ya que parte de la revalorización de bitcoin y de los principales criptoactivos se debía a posiciones de compra apalancadas, es decir, a crédito, basada en deuda.
Una economía 'tokenizada'
La tokenización de activos es cada vez más frecuente, y si bien lleva unos cuantos años en marcha, no ha sido hasta 2021 cuando ha crecido de verdad.
El director regional de Binance, Luis Vaello, ha explicado que "la tokenización de la economía presenta un cambio en el modo de percibir las cosas que tenemos hoy día". "El sector que más está viviendo ese cambio es el del deporte. Las industrias tradicionales de deportes y deportes electrónicos están explorando y participando más activamente en el mundo de las criptomonedas", ha señalado Vaello.
Coincide Haydée Barroso, que ha resaltado que al hablar de 'criptoeconomía' o de 'tokenización de la economía' la referencia se hace a los nuevos activos digitales, las nuevas formas de identidad y de propiedad, así como las nuevas maneras de relacionarnos y colaborar.
Ejemplo de ello son clubs de fútbol como el Atlético de Madrid, el FC Barcelona, el Juventus y el PSG, entre otros, que ya cuentan con su propio token. En el caso del equipo italiano, los aficionados pueden votar una serie de decisiones relacionadas con el club, como cuál será la canción que se cantará cuando el equipo marque un gol.