La líder de Más Madrid, Mónica García, ha celebrado el inicio de la campaña "Menos carne, más vida" comiéndose un buen entrecot de ternera. Mientras la izquierda radical anda pregonando los perjuicios de la carne para la dieta de los españoles y pide encarecidamente que se reduzca su ingesta por el bien del planeta, la diputada ha despachado con gusto un filete con patatas fritas este miércoles en el restaurante Cabreira, en Madrid.
García ha elegido un menú que, sin duda, contradice todo el argumentario sobre los efectos perjudiciales de la ganadería y el consumo de carne para la salud del planeta, según sostienen múltiples asociaciones "ecologistas", a muchas de las cuales está cortejando el líder de Más País, Íñigo Errejón, con el objetivo de crear una gran "alianza verde" en España.
Teniendo en cuenta las cifras del ministro de Consumo, Alberto Garzón, que asegura que para producir un kilo de carne de ternera son necesarios 15.000 litros de agua, Mónica García ha gastado 4.500 litros con su filete de 300 gramos aproximadamente. Pero, como se suele decir, del dicho al hecho... y la diputada no parece estar por la labor de renunciar a un buen filete con patatas a favor del tofu, el seitán, el tempe o la carne sintética que Bill Gates pretende endosar al resto del mundo.
No es la primera vez que la izquierda pretende imponer sus dogmas a los demás mientras se saltan a la torera sus propios postulados. Expresan públicamente su odio a Amancio Ortega, pero visten de Zara. O proponen la prohibición de vender Coca-Cola en el Senado, pero se saltan el boicot y disfrutan de la bebida cuando nadie les ve.
Eso sí, todos aquellos que deseen disfrutar del menú de García, que ha consistido en una ensalada de tomate y berenjenas, entrecot y postre, deben tener en cuenta que subirá de precio con la posible llegada del impuesto a la carne en España. Una propuesta que ya se está debatiendo en Alemania y que ha llegado al Parlamente Europeo a través de una coalición de organizaciones holandesas.