Hace 14 años se iniciaron las obras del edificio InTempo en Benidorm, el rascacielos residencial más alto de toda la Unión Europea que terminó convirtiéndose en un icono de la burbuja inmobiliaria. Sin embargo, una década y casi un lustro después, las obras están cercanas a concluir y estará listo para entrar a vivir. Así, Benidorm se convierte en una ciudad de referencia en el Viejo Continente al situarse en el mapa de rascacielos más altos, un tipo de construcción que no suele ser muy frecuente en Europa.
En cuanto a las características, el edificio mide 198 metros de altura y cuenta con 47 plantas. Además, no solo eso, no es visualmente un edificio cualquiera, sino que son dos torres unidas en la cúspide por una construcción en forma de cono. Algo que dota de personalidad a InTempo haciéndolo mucho más reconocible. Ahora, la playa de poniente de Benidorm contará con una nueva joya en su corona para seguir atrayendo turistas en el peor momento que vive el sector tras la pandemia.
Pero, lo cierto, es que la historia de InTempo viene de largo. El edificio era propiedad de la promotora Olga Urbana, pero la compañía quebró en 2014 como consecuencia de la crisis. Por este motivo, el rascacielos pasó a manos de Sareb, conocido como el ‘banco malo’ creado por Luis De Guindos para absorber los activos tóxicos de los bancos y garantizar su viabilidad. Tras tres años, el fondo SVP Global decidió comprar InTempo para hacer una reforma, terminar de construirlo y relanzarlo con un aire más acorde a la actualidad. A finales de 2019, se inició la reforma desarrollada por Uniq Residential y Dragados conjuntamente. Ahora, última los detalles para concluir las obras del edificio e inaugurar, al fin, el edificio residencial más alto de toda la UE.
InTempo tiene 256 viviendas y 13.000 metros cuadrados de espacios comunes con gimnasio y zona ‘wellness’. Por el momento, según recoge Idealista, están reservadas el 40% de las viviendas y los precios van desde los 250.000 euros en adelante, ya que los pisos más lujosos superan el millón. De hecho, entre las plantas 38 y 45 se encuentran las viviendas más lujosas, con 250 metros cuadrados cada una y unas vistas espectaculares. Eso sí, la mayoría de las reservas han sido realizadas por compradores extranjeros, aunque también lo han hecho algunos españoles.