¿Se ha caído la economía Argentina del mundo?, ¿ha desaparecido del mapa de la inversión internacional?, ¿que implica la nueva calificación de "standalone" a la que han relegado al país? Desde que la semana pasada la calificadora de riesgo Morgan Stanley Capital International (MSCI) publicase que dejaría de considerar a Argentina como "economía emergente", la desconfianza que ya por sí genera el país del peronista Alberto Fernández se ha agravado todavía más si cabía.
Los mercados descontaban que Argentina sería desplazada a la categoría de "mercado fronterizo", que es el siguiente escalafón -sus gobernantes llevaban desde 2019 haciendo méritos-. Pero la sorpresa ha venido cuando MSCI ha hundido su nota hasta "standalone", la peor calificación posible, que está ocupada por economías tan limitadas como las de Jamaica, Zimbabue o Líbano. En el pelotón de los países "desarrollados" están España, Canadá, EEUU, Italia o Portugal.
La razón de esta nueva degradación se debe a los duros controles de capitales que aplica Argentina, por ejemplo, limitando las compras de dólares, lo que ata de pies y manos a la mayoría de estrategias inversoras. Y no será porque no se lo avisaron. En junio del año pasado, MSCI ya advirtió a Argentina de que perdería su estatus si las autoridades del país continuaban aplicando esos excesivos controles. Alberto Fernández, que llegó al poder ese mismo año, hizo caso omiso.
En Libre Mercado hemos hablado con expertos y economistas -argentinos y españoles- para entender qué significa este último golpe a la credibilidad de un país que fuera uno de los más ricos del mundo en los años 20 y que lleva décadas inmerso en una espiral de empobrecimiento generalizado.
"Nos pone al borde de la quiebra"
"El kirchnerismo ha vuelto a Argentina y estas son las consecuencias. Ya lo dice la propia letra de la marcha peronista, que su objetivo es combatir el capital", señala el economista argentino, Nacho Bongiovanni, a este periódico. "Los resultados del MSCI se deben a un Gobierno que ataca la riqueza, que considera el término empresario como una mala palabra, que romantiza la pobreza y que, según dijo el propio Alberto Fernández, se avergüenza de la opulencia de la ciudad autónoma de Buenos Aires", enumera Bongiovanni.
"La economía de Argentina está destrozada. La inflación, que está previsto que supere el 50% este año, es una enfermedad crónica que ha convertido al dólar en un bien más. El sector privado se hace cada vez más pequeño frente a un Estado cada vez más grande y asistencial. Esta rebaja de la calificación va a afectar a la financiación de empresas y va a ahuyentar todavía más a los capitales. Cuando ya el 45% de los argentinos son pobres, nos ponen otra vez al borde de la quiebra", alerta.
Argentina, ¿país subdesarrollado?
En una línea muy similar ha ido el economista, Javier Santacruz. La degradación de la nota del país "le lleva del default parcial, al default total". Por tanto, si ya era arriesgado invertir un solo euro en Argentina, ahora, las posibilidades de perderlo todo se disparan. "Un inversor que entrara en 2018 en el país ha perdido, desde entonces, tres cuartas partes de su inversión", asegura. Ahora, invertir en países "standalone" solo tendrá cabida en "inversiones meramente especulativas, carentes de toda lógica", señala Santacruz, que anticipa un "pánico en los mercados" argentinos "para intentar deshacer posiciones".
La realidad es que "a la espera de las calificaciones del FMI o el Banco Mundial", que son las oficiales, "Argentina ha dejado de ser una economía "emergente" para pasar a considerarse país "subdesarrollado", ni siquiera "en vías de desarrollo"", lamenta el economista.
Una economía "no invertible"
El gestor del fondo Renta 4 Latinoamérica, Alejandro Varela, señala a la "larga y persistente política intervencionista en los mercados de capitales por parte del Gobierno y a la elevada inseguridad jurídica del país", como los principales motivos del catastrófico suspenso de Argentina. "Supone un deterioro adicional en la percepción que tienen ahora mismo los inversores en el país, y dificulta aún más el acceso a una financiación muy necesaria para la economía argentina" añade. Desde la entidad financiera "tomamos la decisión hace varios años de catalogar el país como "no invertible" a efectos de nuestros fondos, y en el caso particular del fondo de Latinoamérica, para evitar vernos dañados por la mala evolución del país y la terrible depreciación de su divisa contra las monedas fuertes", explica Varela.
"La degradación de Argentina hasta el "standalone" ha sido una sorpresa que afectará, sobre todo, a los inversores extranjeros actuales, pero también provocará que todavía haya menos capitales entrando en Argentina, por el riesgo de quedar atrapados, y encarecerá el crédito del sector privado" advierte el economista y profesor Carlos Rodríguez Braun.
Por otro lado, el profesor de Filosofía de la Economía en la Universidad de Navarra, Mario Silar, repasa los primeros efectos de la decisión del MSCI: "Hundimiento de las acciones de las compañías argentinas de los últimos días, tensiones en los inversores, salidas de fondos o más dificultades para conseguir capital". Sin embargo, asegura que "el golpe es sobre todo reputacional: hará que no venga nadie a invertir y que los pocos que hay, se vayan. Creíamos que la venezolización de Argentina no podía pasar y está pasando". Y alerta: " Cuidado con la argentinización de España".
Con este cambio de calificación, "la economía argentina ya no está ni en el banquillo de suplente por lesión. Ya nadie cuenta con que nos recuperemos". Y lo que es peor, para el Gobierno de Fernández es "motivo de orgullo que estos índices extranjeros y capitalistas nos traten mal", añade.
¿Qué es el Índice MSCI?
Los índices MSCI fueron "los primeros índices globales que se crearon para mercados fuera de Estados Unidos. Inicialmente, eran elaborados por Capital International y más tarde, Morgan Stanley adquiere los derechos de la primera, pasando a llamarse Morgan Stanley Capital International (MSCI). Posteriormente Morgan Stanley realiza una escisión y en la actualidad MSCI es una empresa independiente", explica a Libre Mercado la responsable de Oferta Digital de Singular Bank, Victoria Torre. MSCI tiene índices por áreas geográficas, países, renta fija…
Torre señala que estos índices resultan de gran utilidad, porque "ofrecen de una manera sencilla información acerca de la evolución de un determinado mercado financiero o sector". Por ejemplo, el Ibex 35 "refleja el comportamiento de las compañías más grandes de nuestro mercado", recuerda. Además, el MSCI "se utiliza con frecuencia como punto de partida para la construcción de fondos de inversión, siendo además la referencia contra la que se comparan para determinar el buen hacer de un determinado gestor". Por tanto, esta degradación va a tener un impacto "elevado" en los mercados y en las inversiones privadas, ya que las inversiones que replican dichos índices tendrán que deshacer posiciones en Argentina por el castigo. Solo YPF, Globant y Adecoagro cotizaban en el Índice MSCI, por lo que serán las principales perjudicadas por las salidas de inversores.