La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha rechazado cualquier tipo de control de alquileres en España. Según ha explicado la institución, su rechazo se debe a los amplios efectos negativos sobre el mercado del alquiler que provocaría, sin beneficiar necesariamente a los hogares más necesitados.
En el informe sobre vivienda publicado este lunes, la institución considera que una regulación "estricta" del mercado del alquiler afecta de forma negativa a la construcción de nuevos inmuebles, ya que reduce los incentivos para invertir. Del lado contrario, una mayor flexibilidad entre propietarios e inquilinos "puede fomentar" la inversión en vivienda, reducir los desequilibrios entre oferta y demanda y las barreras a la "movilidad residencial".
Un representante de España en la OCDE ha asegurado que las medidas como el control del alquiler "no son la mejor opción política". La evidencia sobre control y límites de alquileres en otros países y ciudades indica que este tipo de medidas "pueden reducir la oferta", además de desanimar a los propietarios de inmuebles a poner sus casas en el mercado.
Ante el problema del alquiler, el club de países desarrollados ha repetido en varias ocasiones que la mejor política posible es "una mayor oferta de vivienda", especialmente en España, donde la cifra es relativamente baja en comparación con la media de la OCDE.
Con relación a la reintroducción de una desgravación por hipotecas, la OCDE también ha subrayado que no es una medida positiva, ya que beneficia a las rentas más altas. Además, asegura que la evidencia disponible demuestra que este tipo de políticas "incrementan los precios de los inmuebles", por lo que no es "un buen uso del dinero" público.