El cerco de Yolanda Díaz a los contratos temporales ha hecho saltar las alarmas entre las patronales de todos los sectores. La propuesta de la ministra de Trabajo para eliminar el contrato por obra o servicio y prohibir el uso del contrato temporal para cubrir picos de actividad vinculados a campañas de todo tipo (como Navidad, rebajas o puentes) y que se consideren dentro de "la actividad normal y permanente" del negocio, está cosechando el rechazo unánime de los empresarios. Para Díaz, deberán ser objeto de contratación a través de las modalidades indefinidas específicamente previstas para tal fin, como la de los fijos-discontinuos.
Tal y como ha informado Díaz a los agentes sociales, el contrato indefinido debe ser la norma en España, y sólo podrán firmarse contratos temporales por "causas productivas y organizativas", como "el incremento ocasional e imprevisible de la actividad empresarial que no pueda ser atendido con la plantilla habitual de la empresa". Además, la responsable de Trabajo pretende que el despido de los trabajadores con contrato de duración determinada sea considerado nulo, en lugar de improcedente, si dicho contrato no está debidamente justificado y con independencia de la causa que alegue la empresa. Su consideración de nulo supondría la inmediata readmisión del trabajador y vaticina una gran litigiosidad en los tribunales.
Construcción
En la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) no dan crédito ante estas propuestas. "Nuestro contrato más utilizado es el específico para el sector, que se llama contrato fijo de obra. Si lo eliminan, el efecto puede ser devastador", avisa el presidente de la patronal de la construcción, Pedro Fernández Alén, en declaraciones a Libre Mercado. "Nosotros ya pagamos así entre 22 y 25 días por año, pero esto es completamente inviable. Si nos obligan a hacer fija a toda nuestra plantilla, y a pagarles los 33 días por año, nos saldría más rentable liquidar la empresa, mandarles a todos al FOGASA y crear una empresa nueva por cada obra".
"¡Cómo voy a tener a alguien contratado si no tengo obra! No le cabe a nadie en la cabeza" exclama Pedro Fernández Alén. "Nuestro contrato fijo de obra está pactado con los sindicatos, no entiendo que cuando algo funciona, y acepta todo el mundo, se quiera cambiar. Además, esta modalidad nos da mucha flexibilidad para mover a los diferentes empleados por distintas obras sin hacer todos los papeleos otra vez y que sigan creciendo como profesionales en un sector que paga muy bien. Muy por encima del SMI".
El presidente de la CNC explica que en la construcción "cada obra es diferente y necesita profesionales diferentes. No puedo tener siempre a los mismos contratados. Si me sale un chalet, pues necesito a un empleado que sepa usar una máquina concreta y si me sale una pista de tenis, a otro perfil con unas habilidades distintas. Tenerles a todos contratados no tendría ningún sentido, ni tampoco la figura de fijo-discontinuo. Además, que nosotros no dependemos de campañas. Las obras salen igual en verano que en invierno". A Pedro Fernández Alén le parece "una brutalidad" declarar nulo el despido temporal porque "si obligas a readmitir a una pyme de 15 empleados a los 25 que contrató para una obra, hundes la pyme, directamente", vaticina.
En el caso de la construcción, la práctica totalidad de los empleados que trabajan en las obras están sujetos al contrato fijo de obra.
Agricultores
Otro sector habitual de los contratos temporales es la agricultura. "La propuesta del Gobierno lo único que demuestra es que la ministra Yolanda Díaz tiene un absoluto desconocimiento del campo", asegura el director de la patronal agraria ASAJA, Juan José Álvarez. "Hacer fijos a todos nuestros empleados sería imposible porque nuestra actividad es principalmente estacional. Es más, es que los propios trabajadores no quieren porque en determinadas zonas cobran el PER y lo perderían", admite.
"Nosotros no somos una fábrica, no hacemos tornillos. Dependemos del clima y de las temporadas. ¿Y si me quedo sin cosecha por una plaga?, ¿les tengo que tener contratados a todos?... ¿Y si necesito incorporar más plantilla porque viene un temporal y tengo que recoger todo lo que pueda rápido?, ¿no puedo contratar a nadie por unos días?", se pregunta Juan José Álvarez.
Sobre la posibilidad de convertir a todos los trabajadores del campo en fijos-discontinuos, el director de ASAJA lo rechaza rotundamente. Asegura que no pueden atarse "de pies y manos con un rígido sistema de llamamientos en campañas sucesivas". La contratación fija-discontinua "es una modalidad contractual concebida para trabajos de carácter estacional, de temporada o de campaña", pero no es suficiente para responder a la "intermitencia e incluso imprevisibilidad de buena parte de las necesidades de mano de obra de las empresas agrarias", añade. De hecho, piden a Yolanda Díaz "más flexibilidad" en la modalidad fija-discontinua.
El representante de una patronal que prefiere no identificarse declara que "tenemos una ministra comunista, y con este tipo de medida, parece que lo que está buscando es que solo queden en España 6 o 7 empresas que da igual que sean viables o no, porque cuando tengan problemas, serán rescatadas por el Estado".
Hosteleros y comerciantes
En la misma línea van en la hostelería. "Los contratos de temporada son fundamentales para nosotros, porque la hostelería vive de la temporada, pero también de los eventos o las bodas. ¿Cómo voy a contratar a un fijo discontinuo para dar una boda en la que necesito 50 camareros, si en la siguiente necesito 20?", se pregunta el presidente de la patronal Hostelería España, Jose Luis Yzuel. "Esto es una entelequia, sería inviable. Espero que la ministra rectifique", añade.
Lo mismo ocurre en el caso de los comerciantes. Para el portavoz de la Confederación Española de Comercio (CEC), Carlos Moreno, el fin de los contratos temporales en su sector "perjudicaría enormemente a las tiendas de las zonas turísticas". Moreno vaticina que si obligan a los empresarios a contratar como fijos-discontinuos a los empleados de temporada "se van a perder muchos empleos porque los empresarios no van a poder asumir esa modalidad de contrato. Al final, dejarán de contratar y asumirán las campañas con las horas extra de las plantilla fija o como puedan". El presidente de los comerciantes explica que en muchas ocasiones "el contrato temporal de pocos días sirve para evaluar el desempeño del trabajador", por lo que contratar directamente como fijo-discontinuo a un empleado sería muy arriesgado.
Las medidas relativas a la temporalidad todavía están en trámites de negociación, por lo que son susceptibles de modificación, algo muy habitual en la estrategia de Yolanda Díaz.