Desde hace años, el Ministerio de Hacienda está redoblando sus esfuerzos por aplicar los avances tecnológicos más punteros en su día a día. Ahora, el Ejecutivo ha creado un Plan Presupuestario que pretende ser aprobado en las próximas semanas para que entre en vigor entre el último semestre del año y los primeros meses del siguiente ejercicio. Dentro del plan, hay un apartado denominado "Medidas y actuaciones de prevención y lucha contra el fraude fiscal".
Esas medidas no son otras que las de profundizar en el tratamiento de los datos que se pueden conseguir gracias a las nuevas tecnologías. En el texto se señala que se combinarán los datos fiscales junto con los registros de la Seguridad Social y, de esta manera, detectarán dónde pueden darse casos de economía sumergida. Para ello, el fisco quiere hacer uso de la conocida y eficaz minería de datos.
La minería de datos no es otra cosa que una técnica que sirve para correlacionar tres parámetros como son la estadística, la inteligencia artificial y el machine learning, donde se usan algoritmos que pueden aprender de datos para hacer predicciones. "Cuanto más complejos son los conjuntos de datos recopilados, mayor es el potencial que hay para descubrir insights (perspectivas) relevantes. Los comerciantes detallistas, bancos, fabricantes, proveedores de telecomunicaciones y aseguradoras, entre otros, utilizan la minería de datos para descubrir relaciones entre todas las cosas; desde precios, promociones y demografía hasta la forma en que la economía, el riesgo, la competencia y los medios sociales afectan sus modelos de negocios, ingresos, operaciones y relaciones con clientes", aseguran desde SAS.
Ampliar la plantilla
Además de hacer uso de la tecnología más avanzada, la Agencia Tributaria pretende ampliar la plantilla para luchar contra el fraude fiscal. Por el momento, no se conoce el número de nuevos trabajadores que entrarán a trabajar para el organismo público, pero la intención es recuperar la reducción que se hizo tras la crisis de 2008 para cuadrar las cuentas públicas.
En este Plan 2020-2023 se encuadran, por tanto, nuevos avances tecnológicos para la lucha contra el fraude y aumento del número de empleados. Una vez que entre en vigor, el fisco realizará una valoración de la efectividad y eficacia del plan en 2023 para tomar nuevas decisiones al respecto.