La hostelería catalana está atravesando un momento complicado, más de lo normal, debido a las restricciones que ha aplicado la Generalidad de Cataluña. A los cierres forzosos se ha incorporado el toque de queda a las 17:00. Teniendo en cuenta que el toque de queda general es a las 23:00, la franja horaria entre las 17:00 y las 23:00 ha causado un aumento de los botellones en Barcelona. De hecho, el 75% de las multas por consumir alcohol en la vía pública han sido puestas en horario diurno.
Según El Periódico, en ese tramo de cinco horas, los supermercados disparan la venta de alcohol –aunque solo tienen permitido venderlo hasta las 21:00– y algunas zonas de la Ciudad Condal, como las plazas del Paseo de Gracia, algunas de Ciudad Vella o la zona del litoral se han convertido en centros neurálgicos de botellones. De hecho, los establecimientos que solo están abiertos para el take away aseguran vender más cervezas que pizzas u otros productos.
Durante la semana del 12 al 18 de abril, la Guardia Urbana desalojó a 725 personas del jardín de las Tres Chimeneas (Tres Xemeneies) y a más de mil del parque de la Ciutadella durante el fin de semana del 17 y 18 de abril. Todos ellos estaban haciendo botellón debido al cierre de la hostelería a las 17:00. Aunque, a partir de las 22:00 el número de infracciones baja debido al toque de queda y a que los supermercados dejan de vender bebidas alcohólicas.
Por otro lado, la Junta Local de Seguridad asegura que se han disparado las llamadas de los barceloneses al 092 (ya inactivo) o al 112 para denunciar el consumo de alcohol y los botellones en la vía pública. Nada más y nada menos que 5.460 llamadas denunciando estas infracciones frente a las 920 del ejercicio anterior. Algo que parece que no para de crecer debido al toque de queda para la hostelería.
De hecho, debido a esta situación cada vez más insostenible, el Ayuntamiento de Barcelona ha pedido al Gobierno regional poder abrir la hostelería hasta las 23:00 y así evitar los botellones vespertinos que se disparan todavía más con la llegada de la primavera. "Estamos en un punto en que nos podemos plantear la apertura de la tarde y primera hora de la noche", aseguró el teniente de alcaldía de Prevención y Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle a RAC1.