Francia se ha convertido en el principal mercado emisor de turistas que llegan a España. El pasado febrero, nuestro país recibió a un total de 74.797 visitantes galos. Por comparación, en el mismo periodo se produjo la entrada de 36.856 turistas alemanes, 14.319 británicos y 5.411 estadounidenses. Así lo confirma el último boletín publicado por el Instituto Nacional de Estadística, publicado esta misma semana.
En cualquier caso, si comparamos las cifras de visitantes internacionales con el pasado año, resulta evidente que las cifras registradas son paupérrimas. En febrero de 2021, el número total de turistas internacionales que llegaron a nuestro país se redujo un 93,58% en comparación con el mismo mes del año 2020. La caída por medio fue del 95,09% en el caso de los aviones, del 85,31% en las entradas por carretera, del 71,82% en los viajes por ferrocarril y del 97,23% en el transporte marítimo.
¿Qué dicen las cifras disponibles sobre la llegada de turistas franceses a Madrid y el resto de regiones? En las últimas semanas, la izquierda política y mediática ha insistido en denunciar la estrategia sanitaria y económica de la comunidad gobernada por Díaz Ayuso, argumentando que su oposición a los confinamientos y su apuesta por mantener abiertos los comercios y la hostelería estaba fomentando un flujo descontrolado de visitantes franceses que llegan a Madrid a practicar un "turismo de borrachera".
No obstante, los datos del Instituto Nacional de Estadística revelan que Madrid no ha sido, en absoluto, el principal destino de los visitantes franceses. Así, el 23,4% de los ciudadanos galos que llegaron a España en los dos primeros meses del año se dirigieron a Cataluña, el 14,3% puso rumbo a Comunidad Valenciana y el 11,5% optó por Canarias. La Comunidad de Madrid ocupa el cuarto lugar de la tabla, lejos de las primeras posiciones, con un 8,4%. Por lo tanto, Cataluña casi triplica el número de visitantes franceses recibidos por Madrid durante enero y febrero de 2021.
En cualquier caso, más que entrar en este tipo de discusiones, lo que debería preocuparnos es la situación global del sector turístico. Y es que, más allá del discurso anti-francés que quiso instaurar la izquierda para atacar a Díaz Ayuso, lo cierto es que la actividad turística está bajo mínimos y apenas logra levantar cabeza, con descensos de más del 90% en el total de visitantes recibidos.