Ahora que el primer trimestre del año llega a su fin, vale la pena echar un vistazo a la evolución de la pandemia, con ánimo de extraer lecciones valiosas. Este ejercicio resulta especialmente interesante de cara a las próximas elecciones autonómicas madrileñas, puesto que la región gobernada por Díaz Ayuso ha desplegado una estrategia menos restrictiva y más flexible contra el covid-19, de modo que un análisis comparado de las cifras territoriales permite comprobar si la apuesta ha merecido la pena.
Empecemos por los datos de positivos. Si tomamos como referencia los boletines del ministerio de Sanidad, encontramos que el número de contagios diagnosticados en toda España ha subido de 1.928.265 a 3.255.324. Dicho de otro modo: desde Nochevieja, la cifra de infectados se acrecentó en 1.327.059 personas, lo que supone un crecimiento del 69%.
Si desglosamos los datos por comunidades autónomas, vemos que el aumento de positivos ha sido especialmente elevado en Comunidad Valenciana (+159%). También superan el promedio nacional los datos de Castilla y León (+110%), Extremadura (+90%), Andalucía (+90%), Galicia (+89%), Murcia (+79%) y Asturias (+72%).
En cambio, la cifra de nuevos positivos en el primer trimestre del año es inferior al promedio nacional en Baleares (+61%), Madrid (+55%), La Rioja (+50%), Cataluña (+49%), País Vasco (+45%), Cantabria (+44%), Aragón (+38%), Castilla-La Mancha (+32%) y Navarra (+26%).
La evolución de la mortalidad
Pero, más allá de los positivos, quizá el dato más relevante y delicado de todos es el referido al número de fallecidos. Desde Nochevieja, España ha perdido a 24.173 ciudadanos debido al covid-19, lo que supone un aumento del 48% en la cifra de decesos comunicada por el ministerio de Sanidad.
Hay, eso sí, diferencias importantes por comunidades autónomas. Las peores cifras son las de Comunidad Valenciana (+141%), que también lidera el aumento de positivos. También se rebasa el promedio nacional en Murcia (+109%), Andalucía (+79%), Galicia (+68%), Baleares (+66%), Extremadura (+64%), Castilla y León (+62%), Canarias (+60%) y Cataluña (+50%).
En cambio, el aumento en la cifra de fallecidos durante el primer trimestre de 2021 es inferior al promedio nacional en Asturias (+40%), Cantabria (+38%), País Vasco (+33%), Aragón (+28%), La Rioja (+27%), Madrid (+23%), Navarra (+16%) y Castilla-La Mancha (+13%).
El modelo madrileño funciona
A la luz de estas cifras, parece evidente que la estrategia de Díaz Ayuso está dando sus frutos. En el plano económico, las cifras de crecimiento de Madrid son diez veces mayores que las del resto de España (4,4% en Madrid, 0,5% en el resto del país). En el plano sanitario, los datos del primer trimestre del año apuntan que el aumento de los contagios ha sido inferior al promedio y que el repunte de los fallecidos ha sido el tercero más bajo del conjunto de las comunidades autónomas.
El siguiente gráfico muestra a la perfección que, desde el fin del "mando único" y la activación de la estrategia madrileña de adaptación, la cifra de fallecidos ha sido mucho más baja y moderada:
Por otro lado, teniendo en cuenta que el 94% de los decesos por covid-19 tienen más de 65 años, vale la pena fijarse en los datos de personas fallecidas en residencias de mayores. Esta serie estadística, que acaba de publicar el IMSERSO, muestra que Madrid es la segunda comunidad con menor número de fallecimientos en sus residencias.