Serendipity 3 es un famoso restaurante neoyorquino conocido por aplicar el lujo a comidas tan cotidianas como los sándwiches o los batidos. En estos momentos, el popular local ostenta tres récords Guinness por sus creaciones culinarias. En la 225 East 60th Street se puede degustar el sándwich más caro del mundo, el postre más caro del mundo y también el batido más caro del mundo. Un hat-trick que le han puesto en las primeras páginas de las guías de restauración de todo el mundo.
Por 100 dólares (85 euros) se puede disfrutar del batido más caro del mundo, que se presentó al mundo el 20 de junio de 2020 coincidiendo con el Día Nacional del Batido de Vainilla en los Estados Unidos. Su creador es el prestigioso chef Joe Calderone que consiguió combinar a la perfección el lujo visual y gustativo en esta creación que ha llamado la atención de los amantes del lujo y también de los paladares más selectos del mundo.
¿Qué lo hacen tan caro?
La respuesta se encuentra tanto en el vaso en el que se sirve, como en los ingredientes que lleva. El batido se presenta en una copa alargada recubierta por más de 3.000 cristales de Swarovski que ya suponen todo un lujo visual. En cuanto a los ingredientes, se utiliza una leche de Jersey famosa por su alto contenido en grasa y por el cuidado en la cría de las vacas; un helado de vainilla de Tahití; nata producida en Inglaterra, famosa por ser mucho más espesa; vainilla de Madagascar; oro de 23 quilates; crema batida; una salsa de caramelo de burra hecha con cacao de Venezuela, avellanas del Piamonte y leche de burra; y, por último, cerezas de Luxardo Gourmet Marchino, unas de las mejores del mundo.
Los otros récords
El Quintaessential Grilled Cheese es el sándwich más caro del mundo y se vende a un precio de 180 euros la unidad. Se trata de un bocadillo hecho con pan francés pulman compuesto por champán Dom Pérignon y copos de oro. Por otro lado, el restaurante que lleva abierto desde 1954 también ofrece el postre más caro del mundo, llamado Golden Opulence Sundae. Está hecho con con helado de vainilla, pan de oro, chocolate, frutas confitadas, trufas, mazapán, cerezas y caviar.