El mercado laboral prosigue con su deterioro. Los datos de paro registrado y afiliación a la Seguridad Social publicados el pasado martes así lo certifican: crece el paro y el empleo, en forma de afiliados, crece ligeramente en el mes pero es el peor febrero desde tiempos de la crisis. Además, se destruyen muchos puestos de trabajo en términos interanuales. Los datos que podemos ver a continuación son concluyentes:
El paro sube en 44.436 personas, que supone un incremento mensual (respecto al mes anterior) de un 1,12%. De esa forma, la cifra de parados registrados supera los cuatro millones contabilizados, con 4.008.789 desempleados. Es el peor dato mensual de un mes de febrero desde 2013, en lo peor de la anterior crisis.
En términos interanuales (respecto al mismo mes del año anterior), que corrigen en gran medida la estacionalidad, se ha incrementado en 762.742 personas (empeora en más de 50.000 parados interanuales el dato interanual de enero), un 23,50%. Es el mayor incremento de toda la serie publicada desde 2010.
Bajan los contratos:
- Descienden un 23,98% interanual en el mes (382.479 contratos menos).
- Los contratos indefinidos caen un 25,68% interanual en el mes.
La afiliación a la Seguridad Social sube en febrero en términos mensuales en 20.632 personas. Ahora bien, si se desestacionaliza el dato, cae en 30.211 afiliados. Pese a esta subida mensual, es el peor dato mensual de un mes de febrero desde 2013.
Y el dato en términos interanuales se remonta, en negativo, también a los peores momentos de la anterior crisis. De esa manera, los afiliados en tasa interanual caen en 400.117 personas, que es el peor dato interanual de un mes de febrero desde 2013.
Estas cifras, ya terribles de por sí, serían más negativas si no fuese, como antes se ha señalado, por el efecto de los ERTE, cuyo número ha aumentado de manera muy importante en febrero, hasta las 909.661 personas
Todo ello indica que el deterioro continúa, se agrava y puede profundizarse más de seguir con tan duras restricciones económicas, que están empujando al abismo a la economía.