La lentitud en las resoluciones judiciales para poder afrontar el problema de la ocupación ilegal está generando situaciones surrealistas como la que se ha vivido en Sevilla. En el barrio de Su Eminencia, un propietario vio cómo su vivienda era ocupada hace más de un año y denunció el hecho ante las pertinentes autoridades. Pero ante la falta de respuestas judiciales, el afectado decidió entrar a su casa por la fuerza para poder desalojar al delincuente que la había ocupado durante más de doce meses. Ante la acción del propietario, el okupa decidió denunciar al dueño a la Policía por entrar a su vivienda por la fuerza, publican medios como ABC.
La denuncia del okupa llegó a los juzgados sevillanos, pero tras una investigación realizada por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, se descubrió que el denunciado era el propietario de la vivienda. Por el momento, el asunto ha quedado en manos de la Justicia y se desconoce la situación actual del piso.
No es el único caso
Hace unos meses, salió a la luz que Lourdes Veiga, una propietaria que tenía un piso ocupado desde el año 2017, había sido denunciada por las mismas personas que estaban habitado en su domicilio de manera ilegal. Para poder dar visibilidad a este surrealista suceso, Veiga decidió hacer público su caso en las redes sociales. "No sabía que hacer. Llamé a los Mossos d'Esquadra, que tomaron acta, pero me dijeron que ni se me ocurriera entrar en el apartamento, que era allanamiento. También me contaron que conocían a la ocupante, es una vieja conocida que ha tomado antes ocho pisos y, antes del juicio, se marcha para evitar ser condenada. Siempre se declara insolvente", relata a Crónica Global.
Veiga consiguió movilizar a un grupo de simpatizantes que la ayudaron a hacer una manifestación delante de su vivienda para conseguir que la okupa desalojara el piso. Sin embargo, este acto le sirvió a la okupa para denunciar a la propietaria por intimidación. "Expliqué en Facebook que celebraban cumpleaños y fiestas multitudinarias en mi piso. Pues bien, también dieron con ello y la allanadora me ha denunciado, también, por daño a su imagen. La okupa de mi piso se ha querellado contra mí", relata al mismo medio.