La cadena de supermercados DIA cerró 2020 con pérdidas por valor de 364 millones de euros, un 54% inferiores a las de un año antes, y su facturación se mantuvo estable pese al cierre del 7% de su red de tiendas (457 establecimientos).
Los resultados anuales de la compañía, enviados este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), reflejan que sus ventas netas ascendieron a 6.882 millones de euros, un 0,2% más, y que alcanzó los 360 millones de ebitda, lo que supone multiplicar por 4,5 el registrado en 2019.
Proceso de reestructuración
El grupo de distribución, que opera en España, Portugal, Brasil y Argentina, sigue inmerso en su proceso de reestructuración y durante el pasado ejercicio redujo en un 3% su plantilla (1.172 trabajadores menos), hasta los 38.616 empleados.
DIA —cuyo principal accionista es el millonario ruso Mijaíl Fridman, con una participación del 76%— acometió en 2020 "la segunda fase del plan de transformación" ideado por sus gestores, y que incluye desarrollar su propuesta de valor comercial, mejorar el surtido poniendo el foco en los alimentos frescos y potenciar su marca blanca.
"Nuestros resultados financieros demuestran los progresos diarios que DIA lleva a cabo en la consecución de su hoja de ruta plurianual. Habiendo sentado las bases en 2019, en 2020 hemos introducido mejoras operativas y comerciales en los cuatro países en los que operamos", ha destacado en un comunicado su presidente ejecutivo, Stephan DuCharme.
En términos comparables —es decir, excluyendo los datos de las tiendas cerradas— la compañía aumentó un 7,6% sus ventas en un contexto marcado por la pandemia de coronavirus, en el que las compras en supermercados se incrementaron de forma generalizada por un trasvase del consumo de fuera a dentro del hogar.
La deuda del grupo terminó el año en 1.868 millones de euros, lo que equivale a una reducción de casi el 8%.
Su parque de tiendas continuó siendo sometido un año más a un proceso de "racionalización" hasta quedar compuesto por 6.169 supermercados (el 56% propios y el resto, franquiciados); por países, España lidera la estadística con 3.918 locales, seguido por Argentina, con 907; Brasil, con 779, y Portugal, con 565.
De los 457 cierres netos, 318 se concentraron en el mercado español, frente a los 101 de Brasil, los 27 de Argentina y los 11 realizados en suelo luso.
Caídas de ventas en Latinoamérica
Pese a contar con menos establecimientos, en España DIA logró aumentar sus ventas netas casi un 8%, hasta los 4.509 millones de euros, y en Portugal creció otro 6%, hasta los 630 millones.
Por el contrario, en Brasil sus ingresos netos cayeron más de un 21%, hasta 930 millones, y en Argentina se contrajeron un 11%, hasta 814 millones, afectados en ambos casos por la devaluación de su moneda local.
Los responsables de DIA han destacado la "expansión" de la venta a través de internet y los servicios de entrega "exprés", y en el caso de España optó por reconvertir 14 establecimientos en almacenes destinados únicamente a atender pedidos "online" ("dark stores") y ha llegado a acuerdos con diferentes socios (como Glovo) para mejorar sus envíos.
En el mercado español y argentino, además, ya se han realizado pruebas con el nuevo modelo de tienda que quiere implementar.
Desde la cadena de supermercados han señalado, asimismo, que en el último trimestre de 2020 se alcanzó "un punto de inflexión" al volver a convertir tiendas propias en franquicias después de que en los últimos años la empresa acometiera el proceso inverso "recuperando" la gestión de más de 700 establecimientos en España y Portugal.
En Bolsa, las acciones de DIA acumulan meses de estabilidad y cerraron ayer, miércoles, a 12 céntimos, lo que representa una revalorización de casi el 40% respecto a su cotización de hace un año.