La multinacional energética Naturgy ha reducido su plantilla en un total de 9.399 personas en los cinco últimos años, es decir, de 2015 a 2020, debido a las desinversiones realizadas en algunos países y a desvinculaciones laborales pactadas con los empleados.
Al cierre de 2015 Naturgy —entonces llamada Gas Natural Fenosa— sumaba una plantilla total de 19.939 personas, después de haber integrado a finales de 2014 a la compañía chilena CGE, en lo que supuso su mayor operación internacional.
Cinco años más tarde, la multinacional cerró 2020 con una plantilla total de 10.540 personas, según datos procedentes de los diferentes informes financieros anuales de Naturgy.
Toda esta reducción de personal se explica fundamentalmente por las desinversiones de negocios hechas en países como Italia, Colombia, Sudáfrica, Moldavia o Kenia, pero también por las salidas de personal pactadas tanto por el anterior equipo directivo, comandado por Rafael Villaseca, entonces consejero delegado, como por el actual, con Francisco Reynés como presidente desde febrero de 2018.
Solo en el último año, es decir, entre 2019 y 2020, la plantilla global de Naturgy descendió en 1.307 personas, desde los 11.847 empleados al cierre de 2019 hasta los 10.540 trabajadores a finales del año pasado. Sin embargo, esa última cifra incluye aún a la plantilla de la chilena CGE, porque aún no se ha cerrado la venta de negocio de distribución de electricidad de esa filial de Naturgy, algo previsto para los próximos meses.
No obstante, la propia Naturgy calcula que su plantilla, descontando ya el personal asociado al negocio vendido en Chile, se situará en torno a las 9.335 personas, tal como consta en la reciente presentación a inversores de sus resultados de 2020.
Con la salida de estos empleados la reducción de plantilla en Naturgy superaría ya los 10.000 empleados desde 2015.
España, Chile y Argentina
El descenso de personal ha sido también acusado en España durante estos cinco años, según datos incluidos igualmente en los informes financieros anuales de la multinacional. Al acabar 2015 la compañía daba trabajo en España a un total de 7.560 personas, y al cierre de 2020 sumaba 5.318 personas, lo que supone 2.242 empleados menos, aunque las salidas se hicieron de mutuo acuerdo, sin recurrir a medidas traumáticas.
En comparación a 2019, la plantilla de Naturgy en España se redujo a lo largo de 2020 en 699 personas, de 6.017 a esos 5.318 empleados mencionados, de forma que el país continúa concentrando a la mayoría del personal.
El segundo lugar en términos de personal aún lo ocupa Chile, debido a que la venta del 96 % de CGE aún no se ha cerrado.
Naturgy sumaba al cierre de 2020 un total de 2.193 personas en ese país, frente a las 2.471 de 2019, es decir, 278 menos.
El tercero en número de empleados es Argentina, con 1.118 personas, 57 menos que en 2019; el cuarto lugar lo ocupa México, con 783 trabajadores, 91 menos que en 2019, y el quinto, Brasil, con 423, lo que supone 33 menos.
Planes estratégicos
En los últimos años Naturgy ha puesto en marcha diversos planes de eficiencias que han facilitado salidas de personal pactadas, y también ha llevado a cabo externalizaciones de servicios, así como ventas de activos -entre ellas edificios corporativos- para hacer a la compañía cada vez más eficiente y ahorrar costes.
Se trata de una política iniciada hace tiempo, acelerada en la etapa de Rafael Villaseca como consejero delegado e intensificada aún más con Francisco Reynés como presidente.
El origen del plan actual de eficiencias está en el plan estratégico de Naturgy hasta 2022, que Reynés presentó a los inversores a finales de junio de 2018 en Londres, un plan en el que Naturgy se comprometía a elevar el dividendo un 59% hasta ese año.
Entonces, Naturgy anunció que pretendía lograr unos ahorros de costes anuales de 500 millones de euros en el año 2022. Sin embargo, la multinacional lo ha concretado más rápido de lo previsto e, incluso, ha ido más allá, al lograr ahorros por 545 millones al cierre de 2020.
Con todo, las últimas desinversiones acometidas por Naturgy también han aportado cuantiosos ingresos a la multinacional, y está por ver qué efecto positivo en el empleo pueden tener las inversiones que realice la empresa en los próximos años.
No obstante, la presentación de su próximo plan estratégico ha quedado en suspenso por la opa lanzada por el fondo australiano IFM por un 22,7% de su capital.
En cualquier caso, la venta de la chilena CGE aportará unos ingresos antes de impuestos de 2.570 millones de euros cuando se cierre, mientras que Naturgy recibirá 600 millones de dólares en efectivo y activos de Unión Fenosa Gas fuera de Egipto cuando se materialice su salida de dicho país.
De entrada, Naturgy ya ha dicho que invertirá unos 1.000 millones de euros este año para potenciar su negocio de renovables.