El chavismo se acaba de proclamar oficialmente vencedor en las elecciones que celebró Venezuela el pasado domingo al asegurar que obtuvo el 72% de los votos. Poco importa que la participación electoral rondase tan sólo el 30%, de modo que la abstención fue masiva, o que ninguna democracia seria reconociese la victoria de Nicolás Maduro, al tildar esta cita electoral de "farsa".
La dictadura en Venezuela ya es un hecho desde hace años y una de sus principales consecuencias, más allá de la ausencia de derechos y libertades fundamentales, es la catástrofe económica que ha experimentado su población bajo la bota chavista, una de las mayores que ha registrado la historia de la humanidad.
No en vano, la renta per cápita se ha desplomado un 75% desde 2013, regresando así a niveles no vistos desde los años 40. Es decir, en los últimos siete años, la riqueza de los venezolanos ha retrocedido un total de 80 años. Pocas veces a lo largo de la historia se ha experimentado un retroceso semejante, especialmente en ausencia de guerra o catástrofe natural.
Venezuela goes to the polls tomorrow in the context of a total economic and humanitarian disaster. Real income per capita is down to levels last seen in the 1940s. Unfortunately, economic hardship is unlikely to be the trigger for political change in the near future. pic.twitter.com/Gm63e5nWs6
— Sergi Lanau (@SergiLanauIIF) December 5, 2020
Otro de los indicadores que ejemplifica el colapso venezolano es la producción de petróleo. Venezuela posee las mayores reservas petrolíferas del mundo y, sin embargo, es incapaz de suministrar gasolina a su propia población desde hace años. La producción de crudo se ha hundido cerca de un 80%, una caída que carece de precedentes, llegando incluso a superar el desplome sufrido en Libia como consecuencia de la guerra.
The collapse of Venezuela's oil sector is nearly unprecedented. Only Libya since 2020 and Iran (1976) are equally bad. Output is a fraction of what it used to be but together with various illegal activities oil sales seem to be enough for the regime to buy support and survive. pic.twitter.com/jIlVoMEazq
— Sergi Lanau (@SergiLanauIIF) December 7, 2020
Todo ello se traduce en un drástico empobrecimiento de la población. El 96% de los hogares están en situación de pobreza, lo cual significa que carecen de ingresos suficientes para poder cubrir el doble de las calorías diarias recomendadas, según la última encuesta de condiciones de vida Encovi. Pero es que, además, el 80% no tiene siquiera recursos para cubrir ese nivel básico de alimentación.
Una de las consecuencias más visibles de esta miseria generalizada es el hambre. Venezuela registra un 30% de desnutrición infantil, un nivel que es propio de los países más pobres de África. Más de 600.000 niños menores de 5 años sufren desnutrición crónica. Según esta encuesta, el 60% de las familias admite haberse quedado sin alimentos en los últimos tres meses por falta de dinero y el 50% sufrió hambre en algún momento.
Venezuela también está experimentando una de las mayores migraciones de la historia en ausencia de guerra. Las estadísticas disponibles reflejan la salida de entre 2 y 3 millones de personas entre 2017 y 2019, a una media de un millón al año, mientras que la ONU proyecta 5 millones de emigrantes, superando incluso el éxodo masivo que causó la reciente guerra de Siria. El 20% de los hogares venezolanos admiten que al menos uno de sus integrantes ha emigrado desde 2014.
Asimismo, la hiperinflación se ha convertido en la norma. El bolívar ha perdido el 99,9% de su valor desde la llegada del chavismo al poder en 1998. Hoy, la inflación supera el 4.000% interanual, según el último Observatorio Venezolano de Finanzas de la Asamblea Nacional. El poder de compra de la moneda nacional es nulo. Esto significa, entra otras cosas, que un refresco cuesta 3 dólares, el equivalente a tres salarios mínimos de un venezolano, el precio de un menú medio en un restaurante asciende a 23 salarios mínimos y un par de zapatos de niño más de 40 salarios mínimos.
Índice Nacional de Precios al Consumidor de la @AsambleaVE (INPCAN) del mes de Noviembre 2020.
📈Inflación Mensual: 65,70%
— Observatorio Venezolano de Finanzas (@observafinanzas) December 4, 2020
📊Inflación Interanual: 4087%
📈Inflación acumulada: 3045,92% pic.twitter.com/otrsUyZRe6
Por último, Venezuela se ha convertido en uno de los países con mayor desigualdad de renta del mundo, dado que su índice de Gini se ha disparado a 0,51, peor que el Congo, Zimbabue o Haití. En definitiva, el chavismo arroja un desastre económico y social sin paliativos.