3.350 euros es el precio del nuevo teléfono móvil de la marca Xor, casi cuatro veces el precio de salida del nuevo iPhone 12. Lo más sorprendente de todo es que se trata de un móvil que solamente tiene conexión 2G y 3G y que solo permite el envío de SMS y la realización de llamadas. Es decir, no es un Smartphone. Esta sorprendente apuesta ha nacido de los antiguos empleados de Vertu, un extravagante fabricante de móviles de lujo que se declaró en bancarrota en el año 2017.
Aunque pueda parecer chocante y sorprendente, lo cierto es que varios clientes reclamaban la creación de móviles similares a los que Vertu ponía en el mercado y, precisamente por eso, Xor ha querido coger el testigo con este terminal. El llamado Xor Titanium tiene un diseño innovador y diferenciador y, además, está hecho de titanio, un material mucho más caro que el aluminio que suelen emplear el resto de fabricantes.
Las prestaciones son muy simples, pero este móvil tiene incluido un sensor que mide la calidad del aire y es capaz de cancelar el ruido durante las llamadas. Otro punto a favor es que su batería, que se puede cargar de manera inalámbrica, dura hasta cinco días con una sola carga debido a que prescinde de muchas otras utilidades. En la práctica se trata de un terminal muy similar a los que había antes de la llegada de los Smartphones y del 4G, pero con un diseño mucho más lujoso, hecho a mano en Inglaterra, y algunos extras ya citados.
Otra característica que le hace especial es la privacidad. El Xor Titanium tiene un cifrado extremo a extremo (AES256) tanto para las llamadas como para los mensajes de texto. Además, la compañía también ofrece a sus clientes una clave secreta para poder borrar los datos que hayan podido ser almacenados de forma remota.
Vertu
Vertu nació como una filial de Nokia en el año 1998 y se encargaba de fabricar móviles de lo más lujosos, de hecho en alguna ocasión sus terminales lograron superar los 25.000 euros. De Nokia, la empresa pasó a manos de Microsoft y después al fondo privado EQT. En 2015 fue la empresa china Godin Holdings la compró la firma, pero la deuda de la empresa, superior a los 140 millones de euros, fue el motivo de la desaparición de la empresa. Ahora sus antiguos empleados han creado Xor para cubrir ese segmento del mercado que compraba móviles Vertu.