El grupo turístico Globalia, al que pertenecen Air Europa y Halcón Viajes, negocia con el Gobierno una ayuda económica para reforzar su solvencia tras la crisis generada por la pandemia del coronavirus, sin que el Estado entre en el capital de la compañía.
El fondo de rescate creado por el Ejecutivo y dotado con 10.000 millones de euros serviría para hacer llegar a Globalia, propietaria también de la cadena de hoteles Be Live, esa ayuda, cuyo importe está aún pendiente de concretar, han explicado este viernes a Efe fuentes conocedoras de la negociación.
La compra de acciones de Globalia por parte del Estado está descartada, porque la condición máxima del grupo familiar es mantener la propiedad del capital, según ha avanzado elConfidencial, con lo que la ayuda tendría que llegar mediante otra fórmula.
La compra de deuda o de cualquier otro instrumento convertible en capital son algunas de las opciones que el propio fondo de rescate se da para actuar, siempre que una compañía viable lo solicite, pero algunas fuentes añaden a Efe que se podría barajar también la concesión de un préstamo participativo.
Esa financiación daría un respiro a Globalia, cuyo presidente, Juan José Hidalgo, advirtió públicamente hace unas semanas de que sin ayudas, el sector iba "a durar un telediario", y sólo en el hipotético caso de que la ayuda no fuera devuelta, permitiría que el Estado entrara en su accionariado.
La crisis del coronavirus ha afectado especialmente a las aerolíneas y al sector turístico, lo que ha llevado a la mayoría de las compañías a actuar. En el caso de Globalia, Air Europa presentó desde marzo un ERTE para el 90% de su plantilla hasta final de verano y firmó un préstamo sindicado con el apoyo del Estado.
La gravedad de la situación llevará a muchas compañías a registrar pérdidas históricas que para Globalia, según El Confidencial, podrían llegar a ser de 600 millones este mismo año, de los que corresponderían a Air Europa unos 380 millones.