Antes del estallido de la pandemia de la covid-19, el Tesoro español había emitido 170.900 millones de euros de deuda pública. Se estimaba que las necesidades adicionales a lo largo del año 2020 fuesen superiores en 196.500 millones, en línea con una brecha del 13% entre los ingresos de las arcas públicas y sus desembolsos.
Este cuadro financiero saltó por los aires en marzo. La tardía reacción del gobierno español y el drástico confinamiento decretado por Moncloa hundieron la actividad y dispararon las necesidades de gasto. Como consecuencia, la brecha que deberá cubrir el Tesoro durante el año en curso asciende a 297.400 millones, lo que significa que el 44% del gasto se financiará vía deuda.
El calendario de vencimientos de deuda que enfrenta España en 2021 y 2022 no es sencillo. El próximo curso toca refinanciar 86.300 millones asociados a bonos y obligaciones, así como 32.390 millones vinculados a letras del Tesoro. Un año después, el capítulo de bonos y obligaciones pendiente de refinanciación ascenderá, como mínimo, a 62.500 millones.
Estas obligaciones podrían haberse topado con unos mercados financieros muy tensionados, pero es aquí donde entra en juego el Banco Central Europeo, que no solo ha dejado los tipos de interés en torno a cero, sino que además ha activado dos programas de compras (denominados PSPP y PEPP) encargados de refinanciar deuda pública, entre otros activos.
Ahora mismo, el saldo de compras del programa PSPP, cuyo tamaño es mayor, suma 275.970 millones de deuda pública española, lo que supone el 13% del total. Por otro lado, el programa PEPP, cuya dimensión es más pequeña, amasa títulos españoles valorados en 22.392 millones, un monto que alcanza el 13% del total.
Si solamente medimos las operaciones realizadas entre marzo y mayo, encontramos que España ha colocado en los programas PSPP y PEPP del Banco Central Europeo un total de 31.746 millones de euros. Este monto supone el 14% del total de operaciones realizadas por la entidad que preside Christine Lagarde.
No hay que olvidar que el Ministerio de Hacienda ha cifrado en 30-35.000 millones el gasto público extra derivado de la covid-19. Por otro lado, los boletines del Banco de España para el primer trimestre ya confirman un repunte de la deuda equivalente a más de 35.000 millones. De modo que el rescate de nuestra deuda por parte del BCE está en marcha y todas las cifras disponibles sitúan las ayudas concedidas "por la puerta de atrás" en niveles superiores a los 30.000 millones.