La Seguridad Social ha abonado este viernes el primer pago del Ingreso Mínimo Vital a 74.119 hogares, en los que residen 250.000 personas, realizando un desembolso de 32 millones de euros.
Este primer pago, que asciende a 430 euros de media, lo reciben los perceptores de la prestación por hijo a cargo sin discapacidad o con discapacidad menor del 33% y que habían sido reconocidos de oficio como beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital, ha explicado la Seguridad Social en un comunicado.
El resto de los beneficiarios de esta prestación por hijo a cargo que no hayan sido reconocidos por la Seguridad Social y que puedan ser beneficiarios de la nueva prestación "deberán solicitarlo, ya que no constaba información suficiente para reconvertir de oficio la prestación".
En los primeros diez días desde el inicio del plazo para solicitar esta renta mínima se han registrado en el Instituto Nacional de la Seguridad Social 344.585 solicitudes, la mayoría presentadas por vía telemática, ya que la atención presencial se retomó ayer.
A quienes realicen la solicitud en los tres primeros meses (hasta el 15 de septiembre), y tengan derecho a ella según la documentación acreditada, les será concedida con efectos retroactivos desde el 1 de junio, explica la Seguridad Social.
El Ingreso Mínimo Vital completa las rentas preexistentes (entre otras, las salariales), hasta ese umbral garantizado para cada tipología que, en el caso de los hogares unipersonales, es de 5.538 euros al año, el equivalente a una pensión no contributiva, distribuida en doce pagas.
Según los cálculos del Ministerio, podrían ser beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital más de 830.000 hogares, en los viven unos 2,2 millones de personas, la mitad de ellos menores.
El Ministerio ha informado, además, que de manera excepcional se ha adelantado a este viernes el pago de la prestación familiar por hijo a cargo semestral que correspondía abonar en julio.