Unilever, el gigante de los productos de consumo, propietario de marcas como los jabones Dove o los helados Magnum y considerado el segundo mayor anunciante a nivel mundial, ha decidido poner fin a la estructura dual anglo holandesa que mantenía desde 1930 y pasará a contar con una única empresa matriz bajo legislación del Reino Unido.
De este modo, Unilever revierte completamente su idea inicial de 2018 de unificar su actividad en una compañía única sujeta a la legislación de Países Bajos y con sede en Rotterdam, plan que, sin embargo, fue abandonado finalmente por la empresa.
"Después de una evaluación exhaustiva durante los últimos 18 meses, la junta directiva continúa creyendo que pasar de la estructura legal actual de bicefalia a la de una única empresa matriz traerá beneficios significativos", ha defendido la empresa, destacando que el cambio permitirá aumentar la flexibilidad estratégica de Unilever, incluso a través de adquisiciones o fusiones basadas en acciones, de cara a un entorno empresarial cada vez más dinámico por la pandemia de la covid-19.
Asimismo, la unificación eliminará la complejidad de la compañía y reforzará aún más el gobierno corporativo de Unilever, estableciendo una base de igualdad en las votaciones para todos los accionistas.
"Una vez finalizado, habría una capitalización de mercado, una clase de acciones y un pool global de liquidez, mientras se mantienen las cotizaciones del grupo en las bolsas de Ámsterdam, Londres y Nueva York", indicó la empresa.
El consejo de Unilever explicó que llevará a cabo el proceso a través de la fusión transfronteriza entre la británica Unilever PLC y la holandesa Unilever NV, por la que los accionistas de esta última recibirán una acción nueva de Unilever PLC por cada título de Unilever NV en su poder, subrayando que estos cambios no afectarán a los intereses económicos de ningún accionista.
Tras el cambio a una estructura de matriz única, la fuerte presencia de Unilever en Países bajos, donde cuenta con 2.500 trabajadores, y Reino Unido, donde la plantilla de la compañía asciende a 6.000 empleados, seguirá sin cambios y sin que haya variaciones en las operaciones, oficinas o niveles de dotación de personal.
La propuesta de unificación está sujeta a ciertas condiciones, incluida la aprobación por parte de los accionistas de Unilever NV y Unilever PLC, así como la autorización de los reguladores relevantes. En este sentido, la compañía distribuirá más información en la documentación previa a las juntas que se convocarán para aprobar el cambio, que podría implementarse a finales de 2020.