La cifra conocida este jueves da la medida de la dimensión de la crisis económica que se avecina por el impacto de la gestión pública en esta crisis del coronavirus. El cierre de aeropuerto, las medidas de confinamiento y el miedo a viajar por el riesgo de contagio han secado el turismo y los viajes.
El número de viajeros que optó por hacerlo en avión dentro de su país se hundió un 99% en abril respecto al mismo mes de 2019, el mayor descenso desde el inicio de la serie, en 1996, tras decretarse el estado de alarma.
Un total de 37.000 viajeros usaron el avión para sus desplazamientos en abril, mínimo también de la serie, según datos del INE publicados este jueves.
También 37.000 usuarios que escogieron el tren de larga distancia para sus desplazamientos. Dentro de este segmento, los viajeros que utilizaron el AVE sumaron 28.000 usuarios, un 98,5% menos que en abril de 2019.
El transporte ferroviario fue utilizado por más de 4,7 millones de viajeros, un 91,1% menos que en abril de 2019, de los cuales 4,48 millones correspondieron a usuarios de Cercanías (-90,5%); 186.000 a Media Distancia (-93,7%), y 37.000 a Larga Distancia (-98,7%).
Por su parte, el transporte por autobús fue utilizado por casi 5,3 millones de viajeros en abril, cifra un 91% inferior a la del mismo mes del año pasado, mientras que el transporte marítimo se desplomó un 95,7%, hasta los 41.000 usuarios.
El número de usuarios del transporte público cayó un 91,4% interanual en abril, su mayor retroceso de la serie histórica, con disminuciones del 91,3% tanto en el transporte urbano como interurbano y del 91,9% en el caso del transporte especial o discrecional.
Estas caídas responden al cerrojazo a la movilidad que se ha decretado merced a la declaración del estado de alarma en España, y a la restricción de movimiento impuestas en otras partes del mundo, además del veto a España como destino especialmente peligroso por la brutal incidencia del coronavirus.
Este parón total y en seco del transporte habla del parón en el turismo, ocio, hostelería, y otros negocios también industriales, dando la medida del shock que ha sufrido nuestra economía.