Pablo Iglesias afirmó recientemente en una entrevista que "los ciudadanos no van a perdonar lo que hizo Díaz Ayuso con las residencias de mayores". El vicepresidente y líder de Podemos pidió la dimisión de la presidenta madrileña y abrió la puerta a tomar acciones legales contra la baronesa popular, insinuando que podrían tomarse "acciones penales" por su manejo.
Sin embargo, los datos disponibles sugieren que la realidad es muy distinta de lo que sugiere Iglesias. Tomando los datos de las propias CCAA, que cubren desde mediados de marzo hasta comienzos de junio, el porcentaje de fallecidos por covid-19 en residencias de mayores alcanza en Madrid el 32% del total, lo que supone el segundo porcentaje más bajo de España. Solo Canarias, con un 12%, tiene un resultado mejor que Madrid en este indicador.
Si se quieren politizar estos datos, como pretende Iglesias, es importante señalar que el 32% de Madrid se quedaría por debajo de otras regiones donde los distintos partidos de izquierda de nuestro país tocan poder, caso de Aragón (86%), Extremadura (85%), Cantabria (73%), Navarra (63%), Asturias (62%), La Rioja (58%), Castilla-La Mancha (41%), Comunidad Valenciana (40%), Islas Baleares (39%) o Cataluña (33%).
La Asociación Española de Geriatría respalda a Ayuso
Estas cifras vienen a reforzar el comunicado emitido recientemente por la Asociación Española de Geriatría, que respaldó el manejo de la crisis sanitaria en las residencias madrileñas y negó que el gobierno de Díaz Ayuso rechazara derivar a los mayores a los hospitales, como afirma la izquierda política.
Puesto que la incidencia mortal del coronavirus es mucho mayor por encima de los 60 años de edad (dicho grupo concentra el 95% de los fallecidos oficiales en España), la CAM planteó a través de Sanidad la posibilidad de aislar a los posibles infectados con otro tipo de intervenciones no hospitalarias. Sin embargo, esto no significa que se vetase el traslado a hospitales, decisión que de hecho corresponde siempre al criterio médico.
Los datos disponibles son muy claros. Entre marzo y junio se dieron más de 10.300 traslados de residencias a hospitales, a un ritmo medio de 106 derivaciones diarias y con un pico de 206 traslados el 6 de abril. Los datos desagregados permiten comprobar que, por ejemplo, el 32% de los ingresados en el hospital de La Paz provenían de residencias de mayores.
Pero la atención de los mayores con síntomas de contagio no se canalizó solamente en hospitales, sino que también se adoptaron otras medidas. Así, 232 residencias fueron medicalizadas, atención primaria realizó 633 intervenciones centradas en este segmento de la población y otros 27.966 expedientes fueron coordinados desde los hospitales para garantizar una respuesta ante los posibles positivos de este grupo vulnerable.
En clave internacional, además, la tasa de muertes por covid-19 ocurridas en residencias de ancianos ha sido muy elevada en todos los países de nuestro entorno. De hecho, el 30% que ha comunicado España contrasta con el 82% de Canadá, el 58% de Noruega, el 51% de Francia, el 49% de Suecia o el 40% de Estado Unidos, aunque no hay que olvidar que el gobierno español es el que más muertes ha ocultado en sus estadísticas.