Han sido dos semanas de duras negociaciones, pero los tres partidos con representación en el gobierno alemán han llegado a un acuerdo definitivo que pondrá en marcha un plan de reactivación de la economía tras la pandemia del coronavirus. Una de las medidas estrella será la rebaja del Impuesto sobre el Valor Añadido, cuya reducción se planteó inicialmente de forma selectiva pero finalmente se aplicará de manera generalizada.
El gabinete de coalición que encabeza Ángela Merkel bajará el tipo general del IVA del 19% al 16%. También se tocará el IVA reducido, para reducir su tipo del 7% al 5%. Esta medida supone un estímulo de 20.000 millones de euros y estará en vigor hasta final de año, con el objetivo de minimizar la caída del PIB y el empleo durante el presente curso.
Además, el Ejecutivo ha acordado limitar las cotizaciones sociales, para que en ningún caso puedan superar el 40% del coste laboral. La medida estará en vigor durante 2020 y 2021. También en clave fiscal, se han anunciado recortes tributarios valorados en 6.000 millones para favorecer la inversión y acelerar la recuperación.
Otra de las medidas que ha pactado el gobierno teutón consiste en la creación de un fondo de ayuda a las corporaciones locales que enfrenten situaciones financieras más delicadas como consecuencia de la covid-19. Los consistorios que entren dentro de este vehículo de financiación podrán acceder a un total de 10.000 millones de euros anuales. La medida se extenderá en el tiempo, pero no incluirá la condonación de deudas antiguas, tal y como se llegó a barajar.
Las familias también van a beneficiarse del programa de reactivación que ha diseñado la CDU de Merkel con sus socios bávaros de la CSU y los socialdemócratas del SPD. La fórmula escogida por las tres formaciones que conforman el gobierno consiste en un pago único de 300 euros por hijo que será transferido a comienzos del segundo semestre a las familias que lo soliciten.
Movilidad eléctrica e innovación
El grueso de las medidas de gasto anunciadas durante esta semana por la Administración Merkel consiste en más de 50.000 millones de euros dedicados a subsidios para la compra de coches eléctricos, el despliegue de tecnología 5G y la promoción de tecnologías como la inteligencia artificial o la computación cuántica.
En total, el paquete de estímulos para apoyar la economía del país tiene un valor de 130.000 millones de euros.