Estos días SpaceX, la empresa fundada por Elon Musk, se ha convertido en el centro de la actualidad empresarial gracias a completar con éxito su primer viaje espacial junto con la NASA. Tras 19 horas de vuelo, la cápsula de la compañía de Musk, en la que iban a bordo dos astronautas, ha llegado a la Estación Espacial Internacional completando así el primer viaje espacial de la historia de SpaceX. Sin embargo, ni Elon Musk, ni SpaceX son los únicos que están en la carrera por conquistar el espacio.
Blue Origin es otra compañía que está trabajando en el futuro de los viajes fuera de la Tierra. Este proyecto de Jeff Bezos, fundador de Amazon, quiere desarrollar una empresa de transporte espacial con viajes para turistas fuera nuestro planeta e, incluso, crear una civilización extraplanetaria. En cuanto a los hechos, Blue Origin ya ha dado sus primeros pasos gracias al lanzamiento del cohete New Sephard, que alcanzó la famosa línea Karman con éxito.
"La Tierra está quedándose sin recursos. Los seres humanos necesitan un plan B. Y el primer paso es construir un vehículo de lanzamiento de bajo coste y altamente operable y reutilizable", explicó Jeff Bezos durante una conferencia en 2018. "No importa qué camino tomes, tienes que pasar inevitablemente por esa puerta. Por ello, Blue Origin se enfoca en eso y sé que no es fácil, pero realmente quiero ver esa vida y civilización dinámicas por el espacio, y que los nietos de nuestros nietos la vean. Tenemos que ponernos en marcha".
Las dos compañías tienen ya una larga trayectoria. Blue Origin se fundó en el año 2000, SpaceX en el 2002. Luego está Virgin Galatic, que se fundó en el 2004. Sin embargo, a pesar de ser la más joven, la empresa de Richard Branson (fundador también de la aerolínea Virgin) hizo historia en diciembre de 2018, cuando se convirtió en la primera empresa en lograr un vuelo comercial tripulado al espacio.
Pese a que las tres compañías quieren hacer negocio con los vuelos espaciales, sus objetivos son distintos. SpaceX busca abaratar los costes y crear un sistema de reutilización rápida, aunque la intención final es enviar a humanos a Marte en un plazo máximo de 20 años. Virgin Galactic, por su parte, se centra en conseguir vuelos orbitales comerciales. Mientras que Blue Origin, quiere explorar el turismo aeroespacial y, en un largo plazo, fundar una civilización fuera del planeta Tierra.