Solarpack registró un beneficio neto atribuido de 6,5 millones de euros en el primer trimestre de este año, frente a los 'números rojos' de 220.000 euros del mismo periodo de 2019, impulsado por un mayor peso del negocio de generación de energía y una mayor concentración de la actividad de construcción para terceros comparado con el primer trimestre de 2019, según ha informado este martes la compañía.
Entre enero y marzo la firma vasca multiplicó por más de cuatro (+318%) el resultado bruto de explotación (Ebitda), hasta situarlo en 18,9 millones de euros, al tiempo que alcanzó unos ingresos operativos de 35 millones de euros, un 179% superiores a los de un año antes.
La compañía especializada en energía solar fotovoltaica ha resaltado que se trata de unos resultados "sólidos", reflejo de una intensa actividad de construcción y de la contribución a la unidad de Power Generation (POWGEN) de los nuevos MW puestos en operación durante 2019 y principios de 2020 en España, Chile e India.
Solarpack culmina desde la última presentación de resultados la entrada de Ardian como socio minoritario en los proyectos de Tacna y Panamericana, situados en el sur de Perú.
"Este importante hito, unido a la finalización de las pruebas de recepción de varios proyectos puestos en operación en 2019 y principios de 2020, refuerzan la posición de liquidez de Solarpack para la ejecución de su plan de negocio", ha señalado.
Asimismo, la compañía ha explicado que se ha adaptado rápidamente a la situación causada por la covid-19, al mantener todas sus plantas en operación y generando energía, sus obras en curso activas y su actividad de desarrollo en estado avanzando a pesar de las restricciones a la movilidad en la mayoría de los mercados donde opera.
En este sentido, prevé un impacto en los ingresos por venta de electricidad en España y Chile este año debido a la bajada del precio a corto plazo ('spot') en estos mercados, si bien gracias a que mantiene una exposición limitada, con la mayoría de sus ingresos contratados a largo plazo, mantiene las guías dadas al mercado en febrero de este año apuntando a la parte baja del rango de Ebitda.
Igualmente, anticipa retrasos en procesos de licitación de contratos de venta de electricidad y en la obtención de permisos de algunos proyectos en desarrollo, lo que podría aplazar aproximadamente dos meses el comienzo de futuras construcciones.
Sin embargo, la compañía ve inalterados los fundamentales de la energía solar fotovoltaica a largo plazo en cuanto a la competitividad, la versatilidad y la velocidad de implantación.