La Dirección General de Innovación y Estrategia Social del Ayuntamiento de Madrid, dependiente del Área de Familias, Igualdad y Bienestar Social, ha elaborado un sondeo sobre el impacto de la situación de confinamiento en la población de la capital española tras la declaración del Estado de Alarma por la pandemia del COVID-19.
Según los datos que maneja el consistorio, el 38% de los hogares de la Villa y Corte han visto reducidos sus ingresos durante los dos últimos meses. Además, en el 9% de los casos se han producido desplomes de más de un 50%, con el agravante de que los hogares que más rentas han perdido son los que menos ingresos percibían.
Entre los niveles más altos de renta se estima que un 70% de trabajadores ha podido seguir operando bajo modalidad de teletrabajo. Sin embargo, el porcentaje de mileuristas de la capital que han seguido trabajando a distancia no llega al 15%. También se da una situación similar en la incidencia de los ERTE, las reducciones de jornada y los despidos: afectan al 10% de los hogares de rentas altas, pero golpean al 50% de las familias de ingresos bajos.
De manera que, lejos de distribuirse de forma homogénea, la política de confinamiento y de restricciones económicas tiene una incidencia especialmente honda en las rentas bajas. Esto no quiere decir que se produzca una transferencia de ingresos hacia quienes más ganan, puesto que todos los grupos se están empobreciendo, sino que la caída experimentada por los más humildes resulta aún mayor que la del resto de capas de población. Se da, pues, el peor de los mundos: más desigualdad y más pobreza.
Crisis de dependencia a la vista
Estos indicadores avanzan un repunte de la dependencia en la capital. El pasado 20 de abril, el Ayuntamiento adelantó el número de peticiones de ayuda alimenticia que había gestionado durante el primer mes de confinamiento: 33.514. En todo el año 2019, esta cifra fue de 34.000. Por lo tanto, en apenas un mes se procesaron casi tantas solicitudes como en todo el curso anterior.
La encuesta del Ayuntamiento viene a confirmar esta deriva. El 14% de los encuestados afirma que necesitará ayudas municipales, un porcentaje al que habría que sumar otro 8% que no descarta verse obligado a reclamar dichos subsidios. Por lo general, las ayudas dependientes de Cibeles alcanzan a menos del 7% de la población madrileña, de modo que los datos de los próximos meses duplicarán o incluso triplicarán dicho porcentaje.
Los datos del estudio municipal confirman que las rentas bajas saldrán más golpeadas, tal y como ya cabía deducir del elevado impacto que ha tenido la pandemia en sectores como el turismo o la hostelería, donde parte importante de la fuerza laboral tiene menor cualificación y retribuciones más bajas.
Madrid, "castigado" por Sánchez
El gobierno de Pedro Sánchez ha decidido prolongar el "cerrojazo" aplicado a Madrid, negando a la comunidad autónoma el paso a la fase 1 del proceso de desescalada. Sin embargo otras regiones que presentan indicadores sanitarios similares o peores que la región gobernada por Isabel Díaz Ayuso sí han podido dar ese salto.
Las autoridades madrileñas han levantado la voz ante este trato asimétrico. Desde Sol estiman que cada día de prórroga en la actual situación de confinamiento supone una caída de aproximadamente 350 millones de euros en términos de producción económica. Aunque la corrección del PIB regional podría quedarse en torno al 6% si la reapertura se agilizase durante el mes de mayo, también se barajan escenarios mucho peores en caso de que el gobierno insista en mantener a Madrid en la fase 0, con caídas del PIB de hasta un 17%. En términos de empleo, lo primero supone una pérdida de 339.000 trabajos, mientras que lo segundo acarrea el despido de 1,1 millones de personas.