Mango ha asegurado contar con "músculo financiero" para superar la crisis derivada del coronavirus y prevé una apertura de sus tiendas en España progresiva y gradual, aunque ello dependerá de las directrices que den las autoridades.
"El año pasado obtuvimos unos buenos resultados y hay que tener en cuenta que, al estar tan internacionalizados —el 80% del total de nuestra facturación—, las duras medidas de España podemos asumirlas", ha asegurado en declaraciones a Europa Press el director de Relaciones Institucionales de Mango, Guillermo Corominas.
"Lo importante es que se puedan ir abriendo las tiendas para que la recuperación sea más fácil", ha añadido, ya que esta semana la multinacional de moda catalana cuenta con 135 tiendas abiertas en todo el mundo, en países como Alemania, Austria y Holanda, y la firma prevé cerrar abril con más de 620 puntos de venta abiertos.
Ha indicado que la afectación de la crisis del coronavirus sobre las ventas se empezará a notar más a partir del segundo trimestre de este 2020, si bien ha apuntado que algunos estudios indican que la industria no recuperará los niveles precrisis covid-19 hasta 2021.
"Es difícil calcular cuál será el impacto, ya que dependerá de las medidas de restricción impuestas por las autoridades de cada territorio y de la predisposición de los clientes a volver a frecuentar los comercios", ha añadido.
Para intentar minimizar la crisis, Mango ha apostado por reforzar el canal online, sobre todo en los países donde hay una mayor afectación de cierre de establecimientos, y ha ampliado el plazo de devolución hasta los 60 días.
Durante la primera fase del confinamiento, la venta online de Mango, que ya representaba cerca del 24% de la facturación, también se vio afectada, pero ahora está recuperando niveles y apunta a una tendencia positiva en lo que queda de año.
Preguntado sobre los países que están teniendo un mejor comportamiento en ventas, ha indicado que son aquellos que han tenido menor impacto por la covid-19 y no han cerrado sus tiendas en ningún momento, como por ejemplo los países nórdicos, Finlandia, Noruega, Suecia, Corea del Sur, Indonesia y Bielorrusia, entre otros.
Medidas de protección
En los establecimientos que se han ido abriendo, Mango ha puesto en marcha diferentes medidas de protección dirigidas a trabajadores y clientes, como proveerles de gel desinfectante y guantes, a lo que se suman mascarillas para el personal de tienda.
El aforo será limitado para permitir la entrada como máximo de una persona por cada 10 ó 20 metros cuadrados, se deberá mantener una distancia de seguridad de un metro y medio, y se limitará el uso del ascensor a un máximo de dos personas.
Además, las prendas que sean devueltas o que alguien se haya probado permanecerán 48 horas en cuarentena antes de ser expuestas de nuevo al público, y los probadores se mantendrán abiertos en los países donde esté permitido, además de realizarse un control del acceso y se abrirán sólo parcialmente, alternando uno abierto con uno cerrado.
Mango permite el pago en sus cajas en efectivo y con tarjeta, pero se incentivará este último, para lo que se desinfectarán los datáfonos después de su uso.