El Gobierno cumple su promesa e interviene el precio de las mascarillas. Tal y como ha anunciado este martes el ministro de Sanidad, Salvador Illa, el precio máximo de venta al público de mascarillas quirúrgicas será de 96 céntimos. Así lo ha anunciado Illa en rueda de prensa, después de la reunión que ha mantenido la Comisión Interministerial de Precios de Medicamentos y Productos Sanitarios, dependiente del Ministerio de Sanidad.
En este sentido, Illa ha informado de que para adoptar esta decisión se ha valorado la situación del mercado, concluyendo que un precio máximo de 0,96 euros, IVA incluido, "no obstaculiza" y permite que sigan los mecanismos de mercado habituales.
El ministro ha vuelto a dar un nuevo bandazo en relación con la necesidad o no de usar las mascarillas para salir a la calle. En una nueva rectificación, Illa hoy ha dicho que no son "necesarias" siempre que se cumplan con las medidas de distancia social e higiene.,
Asimismo, el ministro de Sanidad ha informado de que "próximamente" se va a regular también el precio de las mascarillas higiénicas, si bien se va a esperar a que se active la producción nacional de las mismas y a asegurarse de que la regulación de precios consigue "evitar los abusos".
Alentados por Garzón
Esta idea viene alentada por el ministro de Consumo, Alberto Garzón, que ya anunció que el Gobierno iba a controlar, de forma "inminente", el precio de las mascarillas, geles y guantes, dado que se ha incrementado de forma importante tras la declaración del estado de alarma por el coronavirus.
Garzón ha acusado a sectores "muy minoritarios" de haber demostrado "lo peor" como, por ejemplo, los fabricantes que han optado por subir los precios de estos materiales sanitarios para "enriquecerse" a costa del miedo de los ciudadanos. Según sus cálculos, son productos que antes de la pandemia por el coronavirus valían 60 céntimos y en la actualidad cuestan entre 15 y 20 euros.
Lo que no tiene en cuenta Garzón, es que las confiscaciones del Gobierno a las fábricas nacionales y las trabas Administrativas de su Gobierno para la exportación de estos materiales es lo que está reduciendo la oferta y elevando los precios. Además, fijar precios máximos desincentivará a las empresas españolas a lanzarse a la fabricación de mascarillas.
"Determinados actores del sector de guantes, geles y mascarillas han optado por subir los precios y enriquecerse a costa del miedo y de la necesidad de los ciudadanos, provocando un problema importante para algunas familias. Por tanto, es inminente que haya un control claro y dijo de los precios de mascarillas y otros productos sanitarios", dijo el ministro de Consumo. Un ejemplo de que la realidad le destroza el relato a Garzón es el del fabricante de geles desinfectantes de Mercadona, que no ha subido ni un céntimo su precio a pesar de que la demanda se ha multiplicado, como ya publicamos en Libre Mercado.
Garzón ya ha intervenido los precios de los servicios funerarios con la misma excusa. "Hemos visto casos dramáticos como los de funerarias que subieron hasta 2.000 euros los precios de los servicios y actuamos con rapidez y también hemos visto esto en productos sanitarios como guantes y mascarillas", aseguró el titular de Consumo. Sin embargo, el sector de las funerarias desmintió las acusaciones del ministro comunista.