La cadena de supermercados Lidl repartirá 100.000 kilogramos de alimentos a través de Cruz Roja a más de 8.000 personas mayores ante el estado de alarma decretado para frenar la expansión del coronavirus y proteger así uno de los colectivos más desprotegidos de la sociedad, según ha informado en un comunicado.
De esta forma, la enseña distribuirá alimentos en las dos zonas geográficas con más personas en esta situación, como son Madrid y Cataluña. Serán los propios voluntarios y voluntarias de Cruz Roja, los que se desplacen a cada domicilio para entregar los productos.
Esta acción busca atender a personas mayores que viven solas y en situación de necesidad al no tener familiares que puedan atenderlas, o que por su estado de salud no puedan salir a comprar.
De esta forma, entre los productos que se entregarán a este colectivo se encuentran conservas de pescado y de verdura, aceite, leche, caldo en 'brick', pasta y tomate frito.
Esta acción se enmarca en la política de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) de Lidl, que desde hace años colabora con más de 40 entidades sociales y ONGs en proyectos que contribuyen a mejorar las condiciones de vida de los colectivos más necesitados.