"Las cifras que está presentando Magnum por el negocio de recobro no soportan la primera Due Diligence", dice una de las fuentes de toda solvencia consultadas por Libre Mercado sobre la operación de Corcóstegui con su negocio de recobro. Este periódico adelantó el movimiento de ficha de Magnum al comprar en marzo de 2019 Cobralia, el negocio de recuperación de deuda de Fernando Cañellas.
Magnum se hacía con Cobralia después de comprar Lexer al despacho de abogados Broseta. Así creaba un vehículo muy potente en procedimientos masivos por cláusulas hipotecarias (Lexer) y en recuperación de deuda (Cobralia), a la que añadía otra firma de recuperación, Medina Cuadros.
Ya entonces, las fuentes consultadas por Libre Mercado señalaban que la operación que pretendía Corcóstegui era "colocarle un lacito" y venderlo con una jugosa plusvalía. Y parece que es lo que tiene entre manos.
Hace días, Cinco Días publicaba que "Corcóstegui pone a la venta su proyecto de recobros y abogados" y anunciaba, citando fuentes del mercado, la intención de Corcóstegui de vender este vehículo, sin que se Magnum publicase ningún desmentido. Además, la información de Cinco Días añadía que Magnum Capital había integrado las tres firmas para preparar la venta. Un gigante con 12.000 millones entre hipotecas, créditos al consumo y préstamos a empresas que pretende facturar 50 millones de euros en su primera año de vida.
Magnum escucha ofertas, Lexer niega la venta
Fuentes de Magnum Capital confirman a Libertad Digital que escuchan ofertas por este vehículo de recobro, aunque niegan que se encuentre a la venta. De forma más taxativa, fuentes de una de las compañías integradas, Lexer, se muestran más tajantes a la hora de asegurar que el vehículo no está a la venta, aunque no niegan que se hayan escuchado ofertas. Según cuentan, el interés del mercado se ha adelantado a cualquier muestra de interés del fondo en vender su negocio de pleitos masivos y recobros. Por este motivo, dicen desde Magnum que "estamos en la obligación de escuchar esas ofertas de manera ordenada".
Dudas en la operación
No obstante, pese a la información ofrecida hasta ahora por los medios de comunicación, fuentes de toda solvencia indican que no es oro todo lo que reluce. Estas fuentes sostienen que el aparentemente atractivo vehículo de Corcóstegui tiene algunas sombras. La primera, el precio: rondaría los 200 millones de euros, según las fuentes consultadas y que no han negado las fuentes de Magnum. En el mercado consideran este precio demasiado "caro". Fuentes de Lexer insisten, ante este particular, que el vehículo no está a la venta y, por lo tanto, no se ha puesto precio.
Otra de las dudas que despierta esta operación es la supuesta integración entre las tres firmas. Las fuentes del sector consultadas por Libertad Digital dicen que es meramente formal, que no existe una integración real de equipos y negocios, con lo que el comprador tendría que afrontar esa reestructuración con los respectivos ajustes de personal y costes vinculados a los ERE necesarios para hacer productivo y competitivo el vehículo Lexer, Cobralia y Medina Cuadros.
Preguntadas por estos extremos, las fuentes de Magnum insisten en que se trata de una "empresa única que cubre dentro de un mismo paraguas cuatro servicios legales completos: recobros, pleitos masivos, procuradores y backoffice". En cuanto al nivel de integración, estas fuentes matizan: "Todas las unidades están integradas, o acabando su integración". Eso sí, añaden que "en pocos días se moverán las cuatro áreas de servicio legales a un mismo edificio en Madrid". Además, añaden que el ebitda de la compañía resultante supera los 20 millones de euros.
Las fuentes de Lexer, por su parte, son más vehementes e insisten en que este vehículo está ya totalmente integrado y se han comenzado a tomar decisiones sobre la estructura orgánica y corporativa que tendrá.
Por último, otras fuentes conocedoras de la operación añaden que algunos clientes de Cobralia, entre las que se encontraría alguno de los grandes bancos españoles, podrían estar planteándose rescindir el contrato por los malos resultados que está obteniendo en recuperación desde la adquisición por parte de Magnun Capital. A este respecto, las fuentes de Lexer son taxativas. "¡Es totalmente falso!" Exclaman.