El nuevo Gobierno de Pedro Sánchez no se conforma con ser el que más miembros tiene en el Ejecutivo desde los años 80 y, por eso, ha decidido crear 23 Direcciones Generales nuevas para las que no es necesario ser funcionario. Esto supone que puede acceder a este cargo cualquier tipo de persona que cumpla con los requisitos establecidos. Además, el nombramiento de estos directores generales dependerá de los miembros del Gobierno encargados de esa área en concreto.
Entre esos nuevos organismos se encuentran la Dirección General de Derechos de los Animales, o la Dirección General de Políticas Palanca; ambas dependen de manera directa de la vicepresidencia ocupada por Pablo Iglesias. Precisamente, sobre la institución de Políticas Palanca, Pablo Iglesias ha querido dar una surrealista explicación diciendo que se trata de "aquellos programas o políticas con capacidad de acelerar la implementación de los objetivos de Desarrollo Sostenible, impulsar un desarrollo sostenible coherente y alcanzar un impacto más rápido y sostenido sobre aspectos clave para el progreso en el conjunto de la Agenda 2030".
Polémico nombramiento
La nueva Dirección General de Políticas Palanca ha despertado la polémica, y no es para menos. Tal y como se publicó en el BOE del pasado 29 de enero, Gabriel Castañares será el encargado de desempeñar este cargo. A sus 36 años ha trabajado como cartero para Correos, ha sido becario en Renfe hasta ser el jefe de Gestión y Eficiencia Energética, el puesto que ocupaba hasta asumir esta nueva dirección general.
Con este nombramiento, Castañares se pondrá al frente del segundo puesto más alto después del de la Secretaría de Estado para la Agenda 2030, un cargo en manos de Ione Belarra. Pero no solo eso, Gabriel Castañares pasará a tener un sueldo anual que irá de los 70.000 a los 90.000 euros anuales, a los que todavía podría añadir más variables que aumentarían la cuantía. Aunque, según El Español, tenía un sueldo más elevado en su anterior puesto en Renfe.
La polémica de este nuevo organismo está en que se ha creado una nueva Secretaría de Estado para la Agenda 2030 y una Dirección General para que sirva de palanca y que tiene como misión que la Secretaría de Estado pueda hacer su trabajo. Esto se traduce en que hay dos puestos y dos sueldos públicos encargados de desarrollar el mismo objetivo.