La Generalidad y En Comú Podem han acordado una subida de varios impuestos de cara a los presupuestos de 2020, que tendrá un impacto estimado de 543 millones de euros.
En una rueda de prensa, el vicepresidente del Gobierno regional y el consejero de Economía, Pere Aragonès, ha defendido que su medida se sostiene sobre las ideas de "progresividad y fiscalidad verde y justa", y que servirá para ayudar "a quienes menos tiene", mientras que "contribuirá más quien más tenga".
Tanto Aragonès como la presidenta del grupo de los comunes en el Parlamento, Jèssica Albiach, han coincidido en señalar que se trata de un "primer paso" de cara a obtener un acuerdo global en presupuestos que el Gobierno espera que llegue en breve.
El vicepresidente ha indicado que las medidas tendrán un impacto estimado en 543 millones de euros, aunque el impacto previsto para 2020 será menor, de 173 millones, porque no estarán en funcionamiento durante un ejercicio fiscal completo.
El acuerdo sobre la carpeta fiscal de las cuentas para 2020 se sustenta en cambios en seis impuestos: tramo autonómico del IRPF, Impuesto sobre Sucesiones, Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados, de estancias en establecimientos turísticos, de viviendas vacías y de bebidas azucaradas.
Asimismo, ambas partes han pactado crear un nuevo tributo de carácter ambiental para gravar la incidencia en el territorio de las instalaciones de almacenaje, transformación y transporte de energía eléctrica, un tributo que creen que tiene el blindaje del Tribunal Constitucional.
El paquete se completa con otras dos nuevas medidas fiscales, aunque estas dos no se tramitarán a través de la ley de acompañamiento de los presupuestos, sino por separado. Se trata del impuesto sobre las actividades económicas que generan dióxido de carbono y el impuesto sobre las emisiones portuarias de grandes barcos.
Los detalles
Aún así, los presupuestos de 2020 también incluirán por primera vez el impuesto sobre la emisiones de dióxido de carbono a los vehículos de tracción mecánica, ya creado a través de la ley de cambio climático, pero que se empezará a cobrar el año que viene.
De los 543 millones euros de recaudación extra que se obtendrán cuando todas estas modificaciones estén en vigor durante todo un año fiscal, la que más ingresos aporta es la reforma de Sucesiones, un total de 189,75 millones.
Los cambios en el tramo autonómico del IRPF aportarán apenas 18,6 millones. Por un lado, aumentará la carga fiscal a las rentas de más de 90.000 euros y aplicarán rebajas a los contribuyentes que ingresan menos de 12.450 euros.
El nuevo impuesto a las instalaciones de energía eléctrica generarán 145,12 millones extra, y el de los vehículos contaminantes otros 155,5 millones, mientras que la reforma de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados generará 13 millones, otros 20 millones extra los cambios introducidos en el impuesto a los establecimientos turísticos, 3,5 millones el de viviendas vacías y 6,37 millones más el de bebidas azucaradas.