El Gobierno podría imponer condiciones al grupo suizo SIX en la oferta pública de adquisición (OPA) que ha presentado sobre Bolsas y Mercados Españoles (BME), dado que se trata del operador titular de las infraestructuras del mercado de valores español.
La aprobación de la OPA corresponde al Gobierno y no a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), cuyo presidente, Sebastián Albella, ha explicado este lunes tras la convención anual de la Asociación de Mercados Financieros que su función es asesorar al Ejecutivo y emitir un dictamen previo.
"Es una posibilidad", ha dicho, que la autorización se concediera con condiciones, con la exigencia de asunción de compromisos. "Esa es una de las cosas que se van a valorar" en este proceso, que llevará "varios meses".
La OPA lanzada por las bolsas suizas es una operación "razonable y legítima", aunque incorpora singularidades porque BME es titular de la central de depósitos, de la cámara de contrapartida central y de las bolsas.
Autorización por parte del gobierno
La normativa española y la europea establecen este requisito de autorización por parte del gobierno en este tipo de operaciones para asegurar que la adquisición no perjudica el funcionamiento ordenado ni a la estabilidad del mercado. El presidente de la CNMV entiende que un gobierno en funciones podría tomar esta decisión.
Albella ha precisado también que las infraestructuras del mercado español pertenecen a una sociedad con el accionariado muy atomizado y que, de prosperar la opa, seguirán siendo de una sociedad española, con un accionista de control con más del 50 % del capital, el porcentaje mínimo de aceptación a que ha condicionado SIX la opa.
Los plazos de valoración son complejos porque esta operación está afectada por tres reglamentos europeos, relativos a las centrales de depósito, a las cámaras de contrapartida y a los mercado regulados, cuyos plazos no siempre coinciden, ha concluido el presidente de la CNMV.