Fue el poder en la sombra (y al sol) de la exalcaldesa de Madrid Manuela Carmena. Marta Higueras ha dado el salto a la política nacional siendo nombrada por Iñigo Errejón como su número dos por Más País. Será su Pepito Grillo particular, la persona que estará detrás de toda decisión política de calado que tome el expodemita.
Según las encuestas que otorgan entre 7 y 8 escaños a Más País, será probable que Higueras se siente en el Congreso de los Diputados. Esta íntima de Carmena cuenta con un amplio bagaje en el mundo de la política desde que conociera a la exjuez en los años 90 en Madrid. Su ideario es, claramente, anticapitalista y durante sus años en el Ayuntamiento de la capital se centró en la creación de una Oficina de Mediación que frenara los desalojos.
En un momento en el que las comunidades de vecinos se han organizado para echar a okupas de viviendas ante el hartazgo por las leyes que favorecen a los usurpadores, la política rema contra el derecho a la propiedad inherente a cualquier ciudadano. Lejos de empatizar, por ejemplo, con la anciana de 94 años de Portugalete que ha recuperado su casa okupada gracias a la presión vecinal, la línea de pensamiento y acción de la número dos de Errejón va justo en la dirección contraria: favorecer y velar por los okupas, tal y como lo ha venido haciendo hasta ahora.
En el consistorio madrileño puso la Administración Pública a los pies de los okupas. La sede de mediación antidesahucios, servía para asesorar jurídicamente y ofrecer abogados y mediadores penales a los okupas que lo necesitaran. A aquellos que se presentasen con una orden de desalojo, los izquierdistas les tendían una alfombra roja.
La que fuera teniente alcalde de Madrid quería ir más allá. Conocer con antelación las órdenes de desahucio con el fin de poder paralizar el desalojo y dar una solución al okupa. De los problemas que tuviera el propietario, ni hablar. Toda la maquinaria pública se pondría al servicio de quien se apropia de lo que no es suyo.
Higueras manifestó que el único escollo con el que se puede contar para la creación de la oficina es la Ley de Protección de Datos, "pero si tenemos el consentimiento de las personas afectadas para poder trabajar con sus datos, no habría ningún problema", manifestó en unas declaraciones públicas. Es decir, saltarse a la torera todas las legislaciones vigentes.
A este respecto, el objetivo de Higueras siempre ha sido la paralización de los desahucios. De hecho, cada que vez que ha podido intermediar lo ha hecho, y lo ha conseguido. Ha colaborado activamente con la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), y ya ensayó en el País Vasco, con el Gobierno de Patxi López, intermediaciones prookupas.
Su propósito, además, pasa por ofrecer ayudas y vivienda a quienes son desalojados. Las penurias económicas a las que abocan los okupas y, por las que pasan, cientos de propietarios de clase media en España, parecen importar poco a los que se hacen llamar Más País. Pese a que Errejón intenta ofrecer una imagen moderada, tanto él como sus candidatos siguen abogando por aplicar las tesis del comunismo patrio.