Amazon ha invertido en lo que va de año 15.000 millones de dólares (13.700 millones de euros) en el desarrollo de herramientas, servicios, infraestructura y equipos para las empresas que venden a través de sus plataformas de comercio electrónico y que en España usan más de 8.000 compañías, en su gran mayoría pymes, ha informado la compañía.
En sus webs, Amazon hace las veces de un distribuidor "tradicional", es decir, aquel que compra productos a proveedores para venderlos al consumidor final, al tiempo que permite a terceras empresas usar sus plataformas –conocidas como marketplace– para comercializar sus artículos.
Esos vendedores independientes aportan el 58% de las ventas globales de Amazon, según la firma estadounidense, que ha asegurado que esas compañías crearon el año pasado 1,6 millones de puestos de trabajo, frente a los 900.000 de 2017.
En España, las 8.000 empresas que venden a través de sus webs generan más de 10.000 empleos directos y en 2018 exportaron por valor de 400 millones de euros vía Amazon, el 50% más que un año antes.
Entre las herramientas y servicios más populares entre los vendedores españoles destacan la entrega programada, que permite al usuarios escoger el día y franja horaria para recibir sus pedidos, o la gestión de precios automática, según la misma fuente.
"Las pymes son el alma de la economía española y desde Amazon estamos totalmente comprometidos a ayudarlas e impulsarlas", ha dicho el responsable de Amazon Marketplace en España, Ryan Frank, que ha apuntado que tienen miles de trabajadores en todo el mundo para desarrollar herramientas y servicios específicos para crecer sus ventas en las tiendas de Amazon y expandir su negocio.
"Nuestro éxito depende de su éxito", ha reconocido Frank, que ha apuntado que los servicios que ofrecen a los vendedores independientes, entre los que se incluye logística o gestión de precios, inventarios y publicidad, ayudan a reducir las barreras de entrada para las pequeñas y medianas empresas en el comercio electrónico.