La cotización del petróleo se ha disparado por los ataques que han sufrido dos instalaciones de la petrolera estatal de Arabia Saudí. El altercado, causado por 10 drones, ha hecho que se pierda el 5% del suministro del petróleo mundial.
Por ello, el precio del barril de petróleo Brent para entrega en noviembre subió al cierre de ayer lunes en el mercado de futuros de Londres un 14,59%, hasta los 69,02 dólares. A primera hora de la mañana, el barril de Brent llegaba a subir casi un 20%, el mayor incremento diario desde la guerra del Golfo de 1991.
Esta subida considerable en menos de 72 horas ha provocado un shock en el mercado, como es el caso de los vaivenes empresas petroleras en bolsa. Pero esta vez, Estados Unidos ha aparecido en escena para dar un poco de calma y ha liberado petróleo de la Reserva Estratégica con la finalidad de estabilizar el mercado del crudo.
La pregunta que se hace el público en general es si esta subida del 14% del precio del petróleo repercute en el precio final que pagamos por el diésel y la gasolina. La respuesta es que sí, afecta. Pero afortunadamente no tanto como se puede esperar. La subida del precio final del litro puede ser de un 3% o un 4%.
En la actualidad, el litro de diésel cuesta, de media, 1,201 euros y el máximo histórico es de 1,451. La gasolina por su parte cotiza en 1,301 y su máximo es de 1,528 euros. Además, el impacto en el precio comenzará a notarse dentro de dos semanas.
La respuesta que explica por qué no sube inmediatamente, y al mismo nivel, el precio del combustible que el del petróleo se explica porque el precio de la materia prima sólo supone un tercio sobre el precio final.
La mitad del precio de la gasolina son impuestos y el resto, corresponde a los costes de distribución y a los beneficios para las empresas, que suelen ser de un 15% por litro. Esto supone que, si un consumidor paga 1,2 euros por un litro de diésel, solo 4 céntimos corresponden a la materia prima. Por tanto, la subida total sobre el precio actual sería de 0,036 euros.
Petróleo cae un 5%
El precio del petróleo ha registrado este martes una caída de casi el 5% ante la perspectiva de que Arabia Saudí acabe reanudando antes de lo previsto la producción que paralizó como consecuencia del ataque con drones a sus infraestrucutras.
El precio del barril de Brent, de referencia para Europa, ha registrado una contracción del 4,74% durante esta jornada, hasta situarse en torno a los 65,71 dólares por barril. De esta forma, se ha alejado de los más de 69 dólares, máximos desde mayo, que alcanzó este lunes.
De su lado, el precio del barril West Texas Intermediate (WTI), de referencia para Estados Unidos, ha descendido un 4,88%, hasta situarse en los 59,63 dólares.
El mercado ha reaccionado así después de que la agencia Reuters asegurara, citando fuentes del Gobierno de Arabia Saudí, que la producción de crudo del país islámico se recuperará por completo antes de lo que estaba previsto. De acuerdo a esas mismas fuentes, Arabia Saudí está cerca de restaurar el 70% de los 5,7 millones de barriles de petróleo diarios que paralizó de su producción tras los ataques con drones a las instalaciones de Saudi Aramco. De esta forma, el nivel de producción de crudo volverá a sus niveles normales en dos o tres semanas.