El vino es una de las señas de identidad de España, de Francia y de Italia. Pero, nuestro país gana por goleada en cuanto a las hectáreas de viñedo cosechadas, actualmente contamos con 969.000 hectáreas, un 13% del total mundial que se coloca en los 7,4 millones. Aunque, China se acerca peligrosamente al alcanzar el pasado año las 875.000 hectáreas. Por detrás quedan Francia con 700.000 e Italia con la misma cantidad.
Pero a pesar de ser los que más terreno dedican al cultivo de la vid, China, Estados Unidos e Italia son más productivos. El gigante asiático se corona como el más productivo al recoger el pasado año 11,7 millones de toneladas de uva. Italia se quedó en segundo lugar con 8,6 millones. Por su parte, Estados Unidos y España recogieron 6,0 millones de toneladas de esta fruta.
Esto provoca que no seamos tampoco el mayor productor de vino a nivel mundial. Sumando todos los países, el pasado año se elaboraron 292 millones de hectolitros. De ellos, Italia produjo 54,8 millones alzándose como el mayor productor. Francia se colocó en segundo lugar con 46,5 millones y España en el tercero con 44,4 millones. China no aparece en los primeros puestos porque su principal producción se centra en la uva de mesa.
Poco consumo
A pesar de existir una gran tradición enológica en nuestro país, somos uno de los que menos vino consumimos. En 2018 se consumieron 246 millones de hectolitros de vino en todo el mundo. De ellos, 33 millones fueron consumidos por los estadounidenses, 26,8 por los franceses y 22,4 por los italianos. De hecho, por delante de España se colocan los chinos, los ingleses y los rusos. Los españoles solo tomamos 10,5 millones de hectolitros.
El mayor exportador
Eso sí, el puesto número uno en las exportaciones es para España. Nuestro país vendió 21,1 millones de hectolitros de vino al resto del mundo, Italia se quedó en segunda posición al vender 19,7 millones y Francia en tercera con 14,1 millones vendidos. Pese a ello, las exportaciones han caído en estos tres países en detrimento de las registradas por Chile, Australia y Sudáfrica con incrementos del 15 y el 25%.
Otro dato revelador se encuentra en la facturación. A pesar de vender 7 millones de hectolitros más que Francia, el país galo facturó 9.000 millones de euros por los 2.900 millones facturados por España. A nuestro país también le superó Italia, que alcanzó los 6.000 millones de facturación. Esto se debe a que fuera de nuestras fronteras tanto los vinos franceses como los italianos están mejor valorados que los españoles.