Viajar en helicóptero dejará de ser algo al alcance de unos pocos, Uber quiere que este medio de transporte se popularice y para ello estrenará en Nueva York Uber Copter este martes. La compañía que une transporte y tecnología ofrece traslados desde cualquier punto de la ciudad de los rascacielos hasta el aeropuerto internacional John F. Kennedy por unos 180 euros cada viaje.
Según adelantó The New York Times, hoy Uber Copter comenzará a estar operativo y busca seducir a aquellos que quieran llegar al aeropuerto de una manera rápida y huyendo de los atascos de la Gran Manzana. Posteriormente, la compañía valorará extender su filial por más ciudades de los Estados Unidos.
El principal atractivo que ofrece Uber con este servicio es el ahorro de tiempo. Actualmente, ir en coche al aeropuerto JFK conlleva pasar entre 1 y 2 horas al volante. Sin embargo, Uber tarda 8 minutos en transportar a los pasajeros desde cualquier punto de la ciudad en las que cuenta con helipuerto hasta su destino.
"Este es un trayecto que muchos viajeros realizan cada día y vemos una oportunidad para ahorrarles una gran cantidad de tiempo", explicó Eric Allison, quien está al frente de Uber Elevate, la división encargada de este nuevo servicio.
¿Cómo funcionará?
En principio solo está disponible para los usuarios que sean Platinum o Diamond, los niveles más altos de su programar Uber Rewards. Por otro lado, reservar un helicóptero podrá hacerse con cinco días de anticipación. Cada uno de ellos tiene capacidad para transportar a 5 personas y estará disponible de lunes a viernes. Es decir, un viaje costaría unos 36 euros por persona. Una cantidad bastante asequible que da accesibilidad a todos los usuarios.
Eso sí, Uber Copter no es pionera en ofrecer este servicio. En marzo de este año, la empresa Blade Urban Air Mobility estrenó un servicio de helicópteros que cuenta con helipuertos en tres terminales privadas en Manhattan y en los aeropuertos JFK, LaGuardia y Newark.
Primer accidente
La verdad es que Uber Copter no empezó con buen pie en sus pruebas. El 10 de junio uno de sus helicópteros se estrelló contra un edificio del Midtown Manhattan, en el choque falleció el piloto de la aeronave. Más tarde se conoció que el piloto no contaba con licencia para volar en condiciones de visibilidad reducida, como era el caso.