Los eSports son una realidad y su potencial es asombroso. Para quienes no lo conozcan, los eSports son competiciones de videojuegos, muchas ya profesionales. Los juegos como Fornite son toda una sensación en todo el mundo, alcanzando millones de espectadores que siguen en directo cada partida.
Una prueba del potencial que tiene esta nueva tendencia es el premio económico que se llevará el que consiga levantar la Copa Mundial de Fortnite. El torneo, que se celebrará en Nueva York entre el 26 y el 28 de julio, premiará al vencedor con 2,7 millones de euros, 700.000 euros más de lo que ha ganado Rafa Nadal por conseguir su duodécimo Roland Garros.
Según Statista, el vencedor de Roland Garros se embolsa 2,3 millones de euros por ganar el torneo. El campeón de Wimbledon recibe 2,6 millones de euros, el vencedor del Indy 500 se lleva 2,2 millones y el del Tour de Francia consigue 511.000 euros. Sin embargo, quien consiga ganar el campeonato del mundo del videojuego más popular del momento superará los grandes premios individuales del deporte.
'Fortnite', una historia de éxito
Fornite llegó al mercado de los videojuegos en 2017, pero se consolidó como líder del sector en 2018. Rápidamente, millones de jóvenes quedaron fascinados con el juego y sus bailes ya son popularmente conocidos. De hecho, futbolistas como Özil o Griezmann –que celebra sus goles imitando a uno de sus personajes– y una larga lista de youtubers han mostrado su pasión por este videojuego que arrasa en ventas.
En la actualidad, cuenta con más de 200 millones de usuarios en todo el mundo y tiene unos ingresos mensuales por encima de los 288 millones de euros, según SuperData Research. De hecho, la primera estimación señala que, en 2018, la empresa desarrolladora, llamada Epic Games, terminó con más de 3.000 millones de beneficios.
Con todas estas cifras sobre la mesa, el creador y CEO de Epic Games, Tim Sweeney, de 48 años, se ha convertido en una de las personas más ricas del planeta. Según la lista publicada por Bloomberg, Sweeney, natural de Maryland, tiene una fortuna de 7.000 millones de dólares y se sitúa en el puesto 194 del ranking. Aunque, eso sí, sigue bastante alejado de los 160.000 millones de dólares de Jeff Bezos –actualmente el hombre más rico del mundo–.